Domingo, 22 de Diciembre 2024
El funense que entrena corriendo a Ybarlucea a ver a su hija y se animó a su primera maratón
Leo Valenzuela es el hermano de Pila y comparte su pasión por el atletismo. Hace poco fue noticia por recuperar la moto robada, un hecho que no le impidió animarse al desafío.
A Leonardo Valenzuela no le vengan a hablar de esfuerzo, porque de eso sí que le sobra. El hermano del reconocido atleta funense Pila Valenzuela la pelea día a día para conseguir el mango trabajando como cadete de una casa de comidas. Hace pocas semanas fue noticia porque le robaron su moto, elemento vital de trabajo, pero la pudo recuperar. Mientras todo eso le pasaba, se preparaba para correr 21 kilómetros en la maratón de la vecina ciudad de Rosario de una manera curiosa: iba corriendo hasta Ybarlucea a visitar a su hija. Tanto sacrificio merece premio.
"Hace mucho que busco un buen trabajo, trato de meterle como puedo y seguir siempre para adelante", resume Leo en diálogo con InfoFunes la pelea cotidiana de ganarse la vida. El sábado 4 de septiembre estacionó su moto en la esquina de Independencia y Santa Fe y entró al bar donde trabaja como cadete a buscar pedidos. En ese instante, le robaron el rodado, que apareció varios días después en un descampado.
"La verdad es que el robo me afectó, no sabía qué hacer", recuerda Leo. Cuando sucedió el hecho, ya se venía preparando y estaba anotado para los 21 km de Rosario. "Me sentía mal, triste, pero salí adelante igual, mucha gente de Funes me ayudó, nunca me quedé sin trabajo y seguí corriendo", dice.
El entrenamiento estuvo diseñado por Pila, su hermano, el reconocido maratonista de Funes. "El Pila me ayudó, tiene una banda de experiencia, me había preparado un esquema para entrenar día a día subiendo y bajando kilómetros", cuenta Leo. La experiencia de su hermano fue una de las motivaciones para animarse a correr. Juntos ya habían compartido una maratón de 8 kilómetros en Funes, hace tantos años que ya ni recuerda cuándo fue.
La experiencia en la maratón de Rosario terminó de encender el fuego de Leo, que ahora quiere más. "Me fue muy bien, bajé el tiempo que venía haciendo y tenía piernas para seguir", dice. "Creo que me puedo animar a una de 30 km, soy joven y fuerte y me siento con capacidad para lograr una carrera así. No estaba preparado para una de 42 como la que corrió mi hermano, pero me siento con capacidad para animarme algún día".
"Ahora quiero seguir", se entusiasma Leo, pero advierte: "Me cuesta mucho por el tema del laburo". "Me gustaría poder conseguir un buen trabajo, de mañana, que me permita poder correr a la tarde, ojalá alguien me pueda ayudar", dice.
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