Cinco duendes en ruta: armaron un motor home y salen a la aventura

Vivir viajando. Esas dos palabras suelen representar la fantasía de cada persona que sale de vacaciones. Esa misma idea es la que viene amasando una familia funenese que compró una Mercedes Benz 180 y con sus manos de artesanos la fueron transformando en un motor home, su pequeño hogar para hacerle frente a la aventura.

En total son cinco, mamá Jorgelina, papá Guillermo y sus tres hijos: Lucas (12), Martin (9) y Agustín (7). Y la banda lleva un nombre: 5 duendes en ruta. Hablamos con los padres, artistas y artesanos, para que nos transmitan un poco de todas sus sensaciones.

-¿Cómo surgió esta idea armar la casa rodante con sus manos y embarcarse con toda la familia? ¿Cuál es el principal motivo que los empuja a hacerlo?

-Fue sin querer queriendo, porque en realidad nos dedicamos a esto, porque somos artesanos, artistas. En 2018 una familia nos hace una propuesta de armar un motor home. Fue una experiencia increíble, nos trajeron el colectivo, lo armamos desde cero y quedó fantástico. Y viendo los viajes que hicieron ellos nos entusiasmamos, siempre nos gustó viajar. Se trata de compartir en familia y poder hacer un clic, salir de la carrera de la rata, de estar pensando solo en trabajar para vivir y vivir para trabajar. La vida pasa por otro lado.

Hace unos años cumplimos 20 años de estar juntos, hicimos un viaje importante solos y nos dimos cuenta que viajar está buenísimo y nos surgió la idea de armar un proyecto de viaje familiar para que nuestros hijos también lo experimenten. Y el motor home nos permite viajar todos de la forma más económica posible. Y también aprendés a que no podes llevar todo lo que te pensás que es imprescindible, tenés que ir ligero de equipaje porque todo no entre.

-¿Tienen programado algún itinerario tentativo?

-No tenemos, la idea no es vivir viajando, sino viajar e ir viviendo experiencias nuevas. Primero de todo queremos recorrer todo nuestro país, lo más que se pueda. Y después empezar a salir al exterior y seguir.

-¿Tienen pensado volver, tienen alguna fecha estimativa…?

-No tenemos una fecha de partida ni una fecha de regreso, es un proyecto a largo plazo, la idea es cambiar el chip.

-Va a ser un desafío estar todo el tiempo juntos en un lugar chiquito, ¿cómo lo ven?

-Por un lado nosotros tenemos el taller en casa y estamos acostumbrados a estar todo el día juntos. Experimentamos la cuarentena, toda la etapa que estuvimos encerrados todos juntos y la pasamos genial. La idea igual es estar afuera, no adentro del motor home. Todos los días vamos a cambiar de lugar y está buenísima esa experiencia de no saber dónde vas a terminar el otro día.

Y para terminar nos dejan una reflexión: “Lo que más nos gusta de los viajes es la gente que conocemos, te das cuenta de que hay muchas más gente buena que mala, gente predispuesta, que se acerca para ayudarte. Mas allá de conocer lugares nuevos también es conocer otro tipo de gente”.

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