IAPOS respondió y la nena de tres años será operada este viernes en el Garraham

NOTA RELACIONADA

Finalmente la historia de Sara, la nena funense de tres años que padece de huesos de cristal, recibirá este viernes la intervención necesaria en el hospital Garraham de Buenos Aires en la que se le colocarán tres clavos que se van adaptando a su crecimiento. Una demostración más de que, aunque sea duro y cueste varias horas, hasta meses de lucha, las obras sociales reconocen el objetivo por el cual se unieron sus afiliados: para cuidar de su salud.

“Siempre es necesario luchar por un derecho tan básico como es la salud. Mucha gente no sabe al respecto y necesita asesoramiento. Incluso la no respuesta, el silencio de una obra social ya es una respuesta, y puede ser tomado como un rechazo”, sostuvo la abogada Lorena Moreno, especialista en derecho de salud, discapacidad y salud mental quien esta semana se emocionó al recibir la confirmación a último momento de IAPOS sobre los tres clavos que necesita Sara y que tendrá colocados al salir de la cirugía.

“Fueron muchos días, semanas de reclamos, de no respuestas, fue duro pero se logró el objetivo que es que Sara pueda tener, nada menos, que una mejor calidad de vida y que con estos clavos ella pueda ir creciendo como cualquier chico”, sostuvo la abogada.

A su vez, esta semana también se conoció el fallo a favor de otro niño, pero de la localidad vecina de Roldán. Se trata de un caso en el que la Justicia Federal de Rosario hizo lugar a una medida cautelar y ordenó a OSECAC a que provea y cubra en su totalidad, a un niño de 2 años que padece de deformidades congénitas de los pies, de  una prótesis parcial de pie izquierdo para amputación tipo lisfranc, con doble injert flexible en material termoplástico y demás características solicitadas por su médica especialista tratante y plantilla ortopédica termoldeada para corrección y alineación de pie derecho.

“Estos son insumos específicos que se adaptan a los pies de este nene, no se pueden poner cualquiera. Eso es algo que siempre se debe discutir con las obras sociales. Los implantes de este tipo y de tantos otros para otras necesidades no son de un tamaño determinado, o talle como un pantalón en una tienda. Cada uno debe recibir la ayuda que necesita, personalizado y, claro, eso es mucho más caro, y las obras sociales se suelen hacer las distraídas ante este tipo de pedidos”, agregó.

“Hay que luchar, hay que ser constantes, prolijos en presentar toda la documentación requerida y sin omitir ni ocultar ningún dato y saber que debe ser reconocido. No se deben quedar con un NO como respuesta, hay leyes y derechos que deben ser protegidos y cuando se trata de discapacidad o salud mental, hay medios legales para conseguir la respuesta necesaria enseguida”, concluyó.

Powered by Froala Editor