Es de Funes, tiene cuatro años y padece huesos de cristal: por tercera vez, peligra su cirugía en el Garrahan

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En septiembre Sara tenía que recibir una cirugía por sus fracturas, al padecer del trastorno de huesos de cristal. Necesitaba tres clavos especiales, que se adaptaran a su crecimiento y la obra social provincial Iapos estuvo hasta último momento y sólo entregó dos clavos provisorios, no los que necesitaba Sara. Tras ruegos y resignaciones la niña fue operada en el Garrahan, en Buenos Aires. Pero sus huesos volvieron a sufrir fracturas, ahora necesita unos clavos nuevos, la operación está agendada para este viernes y, nuevamente Iapos no responde. Desde la obra social aseguran que la demora es culpa de la ortopedia, donde confirmaron a los padres de Sara que el 21 de febrero enviaron a la obra social la orden de compra, la cual Iapos nunca abonó y, por ende, la ortopedia no puede entregar los clavos que se necesitan.

“Estamos desesperados y dolidos por cómo nos ignoran. Mientras tanto Sara sufre cada minuto sus fracturas. Es más, el domingo pasado volvió a quebrarse, y en la guardia, como ya tiene una cirugía prevista, le pusieron una férula y no un yeso. Ni hablar que cada viaje ella lo padece mucho porque los movimientos típicos de la ruta, y más si agarramos algún pozo o algo, todo retumba en su cuerpo hasta las lágrimas. Y a la gente de Iapos no les importa. Al principio pensábamos que era pura burocracia, cientos de papeles que presentar. Ahora vemos que no les importamos, no les importa la gente, mucho menos el sufrimiento de una nena de 4 años”, sostuvo Matías, padre de la nena, a InfoFunes con mucha bronca y angustia.

Sara nació con los huesos deformados de las piernas por culpa de fracturas intrauterinas y ha pasado por varias cirugías, incluso dos que debieron sus penderse por culpa de la inoperancia de Iapos. El trabajo médico es enderezarle esas piernas y colocarle clavos especiales, se llaman telescópicos y son importados. Hasta el momento Sara fue recibiendo clavos provisorios, no los que realmente necesita, y por eso mismo sus huesos siguen siendo frágiles y sufre fracturas constantemente. 

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