Tras varios juicios a la Muni de Funes, un cambio clave quiere poner fin a una ocurrente avivada inmobiliaria

La Muni de Funes le puso fin a una autentica avivada inmobiliaria: durante años, algunos emprendedores inmobiliarios aprovecharon una deficiente técnica legislativa en una ordenanza para multiplicar las subdivisiones de propiedad horizontal más allá del límite permitido. 

Se amparaban en un gris provocado por una frase puntual: la ordenanza hablaba de límite de subdivisión en “unidades con destino vivienda”. Ese detalle permitía que los desarrolladores argumentaran que, si las unidades eran comerciales, podían exceder el límite.

Ahora, con un cambio puntual en la ordenanza, el Ejecutivo quiere cerrar la puerta a esa maniobra. Desde ahora, el tope corre igual para todas las subdivisiones, sin importar si se trata de locales, viviendas o cualquier otro uso.

Con este cambio, el Municipio no solo le pone freno a las maniobras inmobiliarias, también se ahorrará cuantiosos recursos que hasta ahora se destinaban a disputas judiciales con los responsables de los proyectos fraudulentos. Al mismo tiempo, logra fijar una norma clara que establece un pie de igualdad para todos los vecinos de Funes.

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