Tapados por la basura

Los pocos contenedores que quedan están rebalsados de basura. En cada cesto domiciliario se acumulan paquetes y paquetes, y en muchos barrios se formaron pequeños basurales generados por el descuido de varios vecinos. En el mejor de los casos, muchísimos funenses que trabajan en Rosario viajan diariamente con el baúl cargado de bolsas para depositar en la ciudad vecina. Mientras tanto, ejecutivo y sindicato se tiran la pelota con respecto a las responsabilidades y no logran un acuerdo que de soluciones a los vecinos.

“No es que no se trabaja, sino que se trabaja con lo que se puede”, afirma Picha Zavatti, titular de Asoem. Desde el sindicato aseguran que lo que hay es falta de materiales para realizar la tarea de recolección con normalidad y reclaman que funcionen los seis camiones compactadores ya que actualmente trabajan con tres o cuatro en el mejor de los casos.

“Lo que no hay es material para hacer el trabajo las horas que se trabajan. Eso cualquiera lo puede verificar. Actualmente hay tres camiones y nos dicen que van a poner en marcha uno más, cuando deberían ser seis camiones recolectando”, señaló y agregó más datos de otras dependencias: “No hay insumos, el otro día no había ni papel ni tonner para emitir las boletas de la tasa municipal por ejemplo. En los centros de salud están faltando insumos, esto dicho por los propios trabajadores. Entonces no es que no hay voluntad, sino que no hay forma de que esto funcione normalmente”.

Sin embargo, desde la coordinación del Obrador Municipal, aseguran que el argumento de los camiones no explica la terrible situación que se vive en la ciudad con la deficiencia en el servicio y apuntan a que desde el Sindicato ponen “palos en la rueda” para solucionarla. Samira Barrionuevo, responsable del área remarcó que si bien es cierto que los camiones son seis, hay uno que no funciona desde hace un año y medio y el otro está roto y sin poder arreglarse desde un año y medio atrás.

En vista de esta situación, aseguran, se ofrecieron alternativas de turnos “acomodados según cada trabajador prefiera, para no quitarle posibilidad de otros trabajos a nadie”, para que en grupos de a cinco personas cubran todas las zonas de la ciudad por tandas y se garantice “al menos que pasen por cada barrio dos veces por semana”. Sin embargo, el sindicato los “ató de pies y manos” al negarse a cumplir otro horario.

NOTA DE TAPA de Info Funes, edición impresa 205.

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