Brutal golpiza en manada a un alumno del colegio María Auxiliadora: “No queremos un Báez Sosa en Funes”

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Este lunes al mediodía, medio centenar de personas reclamaron justicia por Luciano de parte de las autoridades del Colegio María Auxiliadora. Padres, madres y compañeros de Luciano, el chico brutalmente golpeado en el colegio de Funes María Auxiliadora el miércoles pasado, exigieron la expulsión de los agresores. En principio, la denuncia fue que quince chicos golpearon de puños y patadas a Luciano, aunque sólo dos de ellos admitieron haber participado del hecho y hoy están suspendidos por una semana.

En diálogo con InfoFunes, varios padres coincidieron en que esta no es la primera vez que ocurre un hecho de violencia de este tipo en la escuela. De hecho, se dijo que el año pasado un caso similar quedó en la nada, y dos de los agresores de aquél entonces son los que fueron señalados ahora por compañeros de Luciano como sus victimarios. A su vez, entre madres y ex alumnas de la institución reclamaron la falta de accionar del director en varios sucesos de violencia en la escuela y coincidieron: “No queremos un Báez Sosa en Funes”. Porque reconocen que así como esta vez la víctima fue Luciano, mañana puede ser cualquier otro compañero o compañera.

De hecho, se supo también que el alumno víctima del año pasado dejó el colegio a comienzos del actual ciclo lectivo, ya que “las autoridades de la escuela minimizaron el caso”, sostuvieron.

Pablo y Elizabeth, padres de Luciano, encabezaron la convocatoria este lunes en la entrada del Colegio, hablaron con los medios locales y de la región y sostuvieron con firmeza que “confían en que el director de la escuela, Alberto Vicente, tome cartas en el asunto. Tienen toda la información y documentación para expulsarlos”. A su vez, mencionaron a través de panfletos entregados a los presentes: “Para proteger la integridad y seguridad de nuestros hijos, la ley 26.206, permite al señor director expulsar a los agresores”. “Es inadmisible –continúa el escrito- que los agresores codician con nuestros hijos. Rechazamos a los violentos del colegio María Auxiliadora”.

Además, reconocieron que no piensan sacar a Luciano de la institución: “Los que se tienen que ir son los violentos, no nuestro hijo”.

“Acá tanto el colegio como el Ministerio de Educación de la provincia tienen que hacer algo. No puede ser que mi hijo, que es la víctima esté fuera del colegio y los agresores que están adentro en este momento”, dijo Elizabeth.

Y agregó: “Luciano aún no entiende por qué lo golpearon. Nosotros tampoco, porque no hay fundamentos. Simplemente tenían ganas de pegarle y lo hicieron. Esto ocurrió en el horario de la escuela, y no había docentes, ni preceptores ni directivos presentes".

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También se supo que Luciano no quiere salir de su casa, no retomó sus clases de fútbol y está muy dolorido a nivel físico y emocional. De hecho algunos padres le comentaban a Elizabeth y Pablo la idea de poder compartir una merienda entre algunos amigos, en un lugar tranquilo, incluso con PlayStation de por medio, para poder acompañarlo y quitarlo por un rato de la dura situación que atraviesa al no poder ir a la escuela.

Por su parte, Pablo recordó que “el año pasado hubo una situación bastante complicada y similar como la de Luciano, los agresores pertenecen al colegio, un año después de ese caso, no se hizo nada. Los chicos deben estar en el colegio estudiando, sin esos agresores”.

Y lamentó: “Es un colegio con tanto renombre, a veces uno como padre espera años para que sus hijos puedan ingresar, porque confía en su educación, y no se imagina que pueda pasar por la barbarie que estamos pasando ahora nosotros”.

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