Sábado, 28 de Septiembre 2024
Lunes, 13 de Noviembre del 2017

Escuelas secundarias: El eterno cantar de conseguir un banco escolar

<p>Pese a que nuevos emprendimientos educativos se han instalado, la escasa oferta pública en escuelas secundarias sigue siendo un problema que repercute en la vida de las familias funenses.</p>

Vanesa Fresno - InfoFunes

 

La Educación media en la ciudad plantea un problema que año a año se repite: el efecto cuello de botella que se genera en el paso de las escuelas primarias al secundario sigue siendo un asunto postergado. La ecuación es simple y las cuentas no cierran. De las 11 escuelas –públicas y privadas-  de Funes, solo tres cuentan con nivel primario y secundario. La oferta para nivel primario exclusivo es de cinco escuelas (cuatro públicas y una privada), mientras que en el secundario (escuelas que sólo sean de educación media) se limita a tres, de las cuales sólo una es pública.

 

La relación de desventaja es notable en la ecuación de bancos secundarios disponibles, pero el principal componente que agrava la situación sigue siendo la falta de escuelas secundarias públicas. Los egresados de las escuelas primarias estatales Nro 1061 “José Ingenieros”, Esc. Nro 1388 “Antonio Berni”, Esc. Nro 125 “Antonio Herrera” y en breve la flamante escuela Nro 1397 “René Favaloro” (que hasta el momento no completó un ciclo completo de primaria); sumados a los alumnos que terminan séptimo grado en la escuela Joan Miró, nutren las colas de espera de los colegios secundarios disponibles.

 

Pero a este panorama se le suma otra particularidad: las escuelas Nazaret, María Auxiliadora y Sol de Funes ya cuentan con demanda interna que deben garantizar. Por lo que, las opciones locales disponibles se reducen a tres: La escuela media Nro 398 “Malvinas Argentinas” y las escuelas privadas (con un considerable arancel) Liceo Aeronáutico y Raúl Arino.

 

Los colegios que ofrecen todos los niveles educativos prácticamente completan sus cupos en el comienzo de la secundaria con sus propios alumnos de la primaria, por lo que son muy pocos los bancos que pueden ofrecer para los requerimientos de las inscripciones a primer año.

 

“Los chicos que terminan 7mo grado en nuestra escuela tienen prioridad para continuar en la secundaria, así como los que tienen hermanos en la institución, básicamente completamos el cupo con eso. Lamentablemente los bancos que tenemos para ofrecer tienen un límite dado por la infraestructura”, explicó Mario, Director del nivel secundario de la Escuela María Auxiliadora, a la vez que remarcó: “Por más que el espíritu de la escuela sea incluir, la problemática de falta de escuelas en la ciudad nos llega todos los años”.

 

El caso de María Auxiliadora es un ejemplo de lo que sucede en la mayoría de los colegios. Con los 70 alumnos que egresan en el nivel primario prácticamente completan el cupo disponible para el secundario. La comunidad educativa se esfuerza por dar lugar a más alumnos pero es una tarea que poco puede resolverse con sólo con la voluntad de los docentes en una ciudad que año a año crece exponencialmente en su cantidad de nuevos habitantes.

 

“Hemos sacado armarios de las aulas para obtener aunque sea unos 30 centímetros más”, contó Mario mientras explicó cómo concilia el esfuerzo por abrir las puertas de la institución haciendo equilibrio con el compromiso hacia su propuesta pedagógica: “El tope es de 38 alumnos, para que se garantice un clima educativo sustentable”. La escuela ha hecho refacciones con fondos propios y con el aporte de los padres mediante actividades, para poder agregar un aula más, debiendo prescindir de parte del espacio destinado a la sala de usos múltiples.

 

Así como se ve demandada uno de los colegios más antiguos de la ciudad y con mayor trayectoria, las nuevas opciones que van surgiendo también alcanzan un nivel de popularidad inusitado. La Escuela Raúl Arino vino a dar un poco de alivio a partir del año pasado cuando inauguró. Prueba de que fue muy requerida fue el comienzo del año escolar, cuando las clases arrancaron sólo con 35 alumnos entre primer y segundo año, y finalizaron con 107. “Varios alumnos se incorporaron en el transcurso del año, sobre todo cuando sucedió la tragedia del Monticas, en la que la ciudad tuvo serias dificultades en el transporte público”, explicó Mariana Nazutti, Vicedirectora de la escuela.

 

Nazutti corroboró lo que “Campaña por una nueva escuela secundaria en Funes” venía haciendo visible desde hace tiempo: los chicos a partir de los 12 o 13 años comienzan a ser los usuarios habituales de los colectivos que los trasladan a las escuelas de Rosario, Roldán o San Jerónimo. “Arino vino a dar respuesta por partida doble, porque satisface una demanda de educación local, y por su proyecto pedagógico, que rompe con las escuelas tradicionales”, explicó la psicopedagoga.

 

La escuela Arino tiene su inscripción abierta y el 2018 contará con tres primeros años, de 25 alumnos como máximo en cada curso. Sobre el crecimiento que tuvo el colegio en menos de un año (comenzó con dos divisiones de primer y segundo año y ahora ofrece nueve divisiones hasta cuarto año, más la novedad de un primer y segundo grado de primaria), Nazutti reflexionó: “Hay una terrible necesidad de bancos. Sabíamos que era una necesidad en la ciudad, pero nos sorprendió también a nosotros, pensábamos que íbamos a crecer de manera más paulatina”.

 

Por el lado del Liceo Aeronáutico Militar, la instalación en la zona de estos nuevos vecinos escolares no afectó su demanda de bancos. Si bien la inscripción requiere de la aprobación de un examen de ingreso y actualmente –y hasta el 17 de noviembre- continúan pre inscribiendo alumnos, desde el colegio adelantaron que se prevén “tres divisiones para el primer año” y que del total de 490 alumnos matriculados que tiene el Liceo en sus distintas modalidades (cadete media pensión, cadete pensión completa y bachiller nacional), suelen ser entre 70 y 80 los de primer año, informó el Capitán Tortorisi, jefe de incorporaciones.

 

Ahora bien, dentro de las opciones de escuelas secundarias mencionadas hasta el momento son todas aranceladas. Ya sean escuelas privadas pagas o escuelas públicas de gestión privada, todas cobran una cuota mensual y matrícula. Tal como lo anticipamos, el cuello de botella tiene un doble componente, la cantidad de bancos disponibles y la no menor distinción de que su arancel, las opciones con bancos disponibles en la ciudad son la EEM 398 como opción pública, o las opciones antes mencionadas cuyas cuotas se elevan considerablemente.

 

La Escuela 398, quien tiene abierta su inscripción a partir del lunes 6 de noviembre en el horario de la tarde, ofrece cuatro divisiones para primer año (todas en el turno tarde). Y de acuerdo a los recursos edilicios y humanos con los que cuenta, a medida que avanzan a los años superiores deben ir reduciendo las divisiones: comienzan con cuatro primeros años y finalizan con dos quintos. “No es bueno ser la única opción, hay veces que nos hemos visto muy demandados. Se necesita una nueva escuela secundaria”, indicó Facundo, secretario escolar a cargo de las inscripciones.

 

Los proyectos son varios y en su mayoría de larga data. Ya en el año 2011 ya se habían juntado cientos de firmas reclamando una Escuela Técnica, para ampliar las opciones a la hora de comenzar la secundaria. En su momento el reclamo fue acompañado por las firmas de los concejales y elevaron el pedido a la cámara de diputados de la provincia.

 

El pedido se reanima y cobra entusiasmo de manera espasmódica: la alegría de la confirmación que resultó de la ley de expropiación de la Quinta de Funes impulsó nuevamente el pedido a principios de este año, exigiendo que se cumpla con el ítem que indica que ese espacio se utilice en parte para la instalación de una escuela secundaria técnica.

 

En el año 2014 también hubo intentos de que la Universidad Nacional de Rosario desembarque en Funes con una propuesta de educación media preuniversitaria. Las gestiones eran llevadas adelante por la entonces intendenta Mónica Tomei y el ex Rector de la UNR Darío Maiorana quien en su momento había declarado: “Se trata de una zona en donde, según los estudios que hizo la UNR, existe una carencia importante de oferta media”

 

A su vez, pocos días atrás volvió a cobrar fuerza la idea ministerial de destinar el edificio donde actualmente funciona la escuela primaria Nro. 1061 para instalar allí, una vez que la misma se mude en marzo del 2018 a su nuevo hogar, una futura escuela media.

 

El reclamo sigue en pie, y espera que las autoridades públicas tomen cartas en el asunto. Mientras tanto, los adolescentes funenses continúan en la trabajosa tarea de encontrar cupo.