Condenaron a funense que facilitaba la prostitución

Luis Alberto Mantovani Testa, el hombre que saltó a los títulos de los diarios en septiembre de 2014 al resistir un allanamiento de las Tropas de Operaciones Especiales provinciales a los tiros y con una granada en su casa de Catamarca al 1600, fue condenado a 5 años de prisión por organizar, promover y sacar crédito de la oferta sexual a través del conocido portal supergatitas.com desde 2001, a partir del cual se promovía la oferta sexual, se concretaban citas en privados y casas particulares y se cobraba un porcentaje de lo que cobraban las mujeres. La investigación comenzó en mayo de 2013 a partir de un llamado al 145, la línea nacional de denuncia de casos de trata, y en marzo de 2016 fue elevada a juicio.

Mantovani, para la justicia, fue sindicado como el principal beneficiario de la red de citas: se probó que organizaba y dirigía la oferta sexual, coordinaba las citas y se quedaba con un porcentaje de lo que cobraban las trabajadoras sexuales. Para la ley argentina el trabajo sexual no es delito, pero sí lo es facilitarlo y explotar económicamente a quien lo ejerza. En 2013 la ley fue modificada y se quitó la figura del consentimiento, lo que hizo que este caso cuadre en la conducta descripta por la ley como delictiva.

En el allanamiento en su casa, encontraron un sistema cerrado de cámaras en todas las habitaciones y computadoras conectadas en red con los departamentos donde se daban las citas en Rosario. Cuando las TOE ingresaron, Mantovani miraba un canal evangelista junto a sus tres caniches toy. Resistió a los tiros porque, según se excusó después, creyó que eran ladrones. La casa era usada para fiestas VIP, según declararon los vecinos posteriormente.

En el mismo operativo, dirigido por la entonces jueza Alejandra Rodenas, se allanaron seis domicilios más. En dos de ellos, San Juan al 1400 y Presidente Roca al 1200 de Rosario, funcionaban privados con mujeres trabajando, todas mayores y todas bajo su consentimiento. Hubo seis detenidos más aparte del pistolero funense: David Jesús Centeno, quien según la acusación era el recaudador de los privados, Liliana Edith Guzmán, una mujer relacionada a Mantovani a cuyo nombre se encontraban varias líneas de las mujeres publicitadas, era la titular del servicio de cable e internet de uno de los privadas y garante del alquiler de otro, y David Jesús Trigueros, administrador del sitio web, encargado de atender los llamados de los clientes y de derivarlos a los diferentes privados de acuerdo a sus preferencias, siempre según la acusación. Además, tres hombres fueron detenidos sospechados de ser custodios de los privados.

Trigueros es hijo del radical Néstor Trigueros, en ese entonces coordinador del gabinete rosarino. Además, se dijo que era asesor del concejal Jorge Boasso, aunque después se desmintió. Sin embargo, el caso generó un sacudón político que terminó con Trigueros padre desplazado de su cargo.

De los cuatro detenidos, solo Mantovani fue condenado en un juicio abreviado en el que aceptó ser el responsable de los delitos de facilitamiento y explotación económica de la prostitución. Seguirá bajo el régimen de la prisión domiciliaria como hasta ahora y deberá pagar una multa de 16 mil pesos.