Vecinos de Funes organizan cacerolazo contra la inseguridad

Cansados de los robos, vecinos de Funes comenzaron a organizar desde las redes sociales un cacerolazo en reclamo de seguridad. La protesta se llevará a cabo el próximo sábado, pero para la intendenta Mónica Tomei, la situación que vive la ciudad no es diferente al del resto del país. Ponderó, sin embargo, las nuevas medidas de seguridad que se implementaron con el apoyo del gobierno santafesino aunque admitió que no es fácil el control. Apuntó contra las fiestas privadas en las casas quintas.

Los funenses aseguran que el Jardín de la provincia ya no es la ciudad tranquila que solía ser. Por ello convocaron a movilizarse el sábado a las 17 en la plaza San José, de calle Angelome y la ruta 9.

No obstante, Tomei aseguró en diálogo con Radiópolis, el programa que conduce Roberto Caferra por Radio 2, que se reforzó la vigilancia y se dispusieron 10 cámaras de seguridad. De todos modos, por los muchos accesos que tiene la ciudad -por Avenida Pellegrini, la ruta 9, calle Mendoza y la autopista, entre otros- para la mandataria es muy difícil trabajar sobre el control por lo que apeló a la prevención.

"Por la ruta 9 pasan por día 14 mil vehículos, por la autopista, 12 mil. No es tan fácil es control", ilustró.

Indicó que la delincuencia es el resultado de la falta de oportunidades de inserción por lo que destacó los créditos blandos que ofrecen desde la Municipalidad para distinos emprendimientos productivos.

Finalmente criticó a las "inmobiliarias inescrupulosas" que alquilan casas quinta por tres o cuatro días y propician la realización de fiestas privadas, otro de los factores, a su entender, que rompen con la tradicional calma de Funes.