Lunes, 23 de Diciembre 2024
Miércoles, 15 de Mayo del 2013

“No quiero bajarme nunca de las tablas”

Daniela Machasetti, actriz, trabajó en películas nacionales. Contenta de vivir en la ciudad, afirma: "Funes tiene una cultura maravillosa, tanto en fotografía como teatro, danza y otras actividades".

La relación de Daniela Machasetti con la actuación comenzó desde muy pequeña: "Jugábamos con mis hermanas y cada una tenia una profesión, hoy las tres somos aquello que jugábamos ser", aseguró a InfoFunes, y recordó que se escapaba del colegio para hacer teatro.

Al hablar de su infancia, rememoró cuando su padre "nos acostaba en la camita a las tres hermanitas y nos contaba un cuento que tenía un personaje principal, Josecito", y a ella le encantaban esas historias. "Entonces le juré a mi papá que nunca iba a dejar de contar una historia", relató.

Los primeros trabajos que obtuvo fueron pequeños hasta que le propuso a su padre, quien es saxofonista, trabajar juntos, y de esta forma nació "Sutilezas, pequeñas cosas de la vida", cuyo argumento está basado en representaciones teatrales de cuentos de autores como Bacaglia, Benedetti y Bucay. "El espectáculo se desarrolla con música en vivo debido a que en los momentos en que yo no contaba ninguna historia mi papá pasaba entre la gente tocando el saxo". La experiencia de trabajar con él, asegura, fue "la más hermosa del mundo".

La actriz tuvo la oportunidad de trabajar en el film titulado "La verdad del Martín Fierro" con el reconocido actor Juan Palomino. Su padre está también involucrado en cómo Daniela consiguió el papel. En ese momento había sido contratado para tocar en una fiesta en San Luis. Al preguntar de qué se trataba el festejo, le comentaron que unos productores estaban buscando tierras para hacer la filmación de esta película.

Entonces él mismo dejó los datos de Daniela y la llamaron para hacer un casting, tras el cual quedó seleccionada. Al enterarse que había llegado a formar parte de la filmación, soltó el teléfono y se puso a gritar, ya que había leído el Martín Fierro para esta ocasión. "Fue un mérito personal", aseguró.

Respecto a su personaje (La Cautiva), lo recuerda "con amor". De la filmación de la película, a Daniela le quedó guardada una anécdota simpática: su mamá interrumpió una de las grabaciones metiéndose al set gritando ¡es Juan Palomino! Luego de lo sucedido, terminó participando de extra en una de las escenas. Daniela se encontró alejada de su profesión por un tiempo.

"Al estar alejada de la actuación me enfermé, tuve cáncer dos veces", recordó. A pesar de esto, tuvo una familia que la apoyó dándole esperanzas para seguir adelante y empujándola a aferrarse a lo que tanto amaba.

Otra de las cosas que la ayudo a seguir adelante fue el hecho de tatuarse el cuerpo con distintas frases inspiradoras. Daniela lo hizo con el fin de que sus cicatrices no sean las marcas más importantes y para poder levantarse leyendo esas frases y pensando "bienvenido día", "Y acá estoy sin nada, y con todo el amor del mundo".

Actualmente, retomó su trabajo y con una muy buena oportunidad (aunque todavía no está totalmente confirmada) para trabajar junto a Fernán Mirás, invitada por productores de Buenos Aires.

Funes y su cultura

"Funes tiene una cultura maravillosa, tanto en fotografía como teatro, danza y otras actividades", afirmó la actriz. "Trabajar acá me cambio muchísimo, porque pienso que no hace falta estar en Hollywood para ser un gran artista; a veces el lugar mas pequeño te da el lugar mas grande", subrayó.