Se viene la maratón del plástico
Desde la Escuela 1.388 se proponen resguardar el medio ambiente con un original proyecto. "Hay generar la menor cantidad de basura domiciliaria posible", afirman.
Hay que concientizar. La degradación de los materiales pet y el intento de generar la menor cantidad de basura domiciliaria posible es una consigna que merece una atención especial. Fieles a esa necesidad, las autoridades de la Escuela 1.388 lanzaron un original proyecto denominado "Maratón del plástico".
En un intento de buscar sus propios recursos económicos para el viaje de egresados de 7° grado, alumnos de sexto apelaron a la venta de tortas para las merienda de los recreos. La idea no era mala, pero no alcanzaría a cubrir los gatos para subirse al colectivo.
Ahí fue cuando surgió entonces "un proyecto de trabajo comunitario tendiente tanto a juntar dinero como a favorecer el reciclado de los envases plásticos", explicó Alejandra Martínez, una de las coordinadores de la iniciativa.
El problema de los basurales a cielo abierto "sin ningún tipo de tratamiento" se prolifera por todo el mundo. En la región la principal afectada es la localidad de Pérez, asiento del basural Séptima Región, mal recordado por los funenses que debieron soportar más de una vez los olores nauseabundos que emanaba.
"Los ciudadanos de esta zona deberíamos estar más que sensibilizados sobre este tema. La única oportunidad es la reducción de la generación de basura domiciliaria, o lo que en algunas ciudades se ha denominado Proyecto Basura Cero", afirman desde la Antonio Berni.
Tres objetivos fundamentales avalan la iniciativa: generar conciencia para que cada familia tenga en su casa una compostera donde todo el resto orgánico se degrade y vuelva a la tierra; formar consumidores responsables que no utilicen bolsas de mylon y sí bolsos compras, que prefieran la compra a granel y no en paquetes con distintos materiales que retardan la degradación; y maximizar las instancias de reciclado evitando comprar, preferir la reutilización al compre-use-tire.
En la parte de las actividades, investigarán las características químicas y el comportamiento del plástico, evaluarán sobre el tiempo de degradación y los efectos y realizarán una colecta de plásticos pet para la venta a una empresa de Rosario encargada del reciclado. De esa manera el viaje de egresados ya no será un sueño.
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