Viernes, 20 de Septiembre 2024
Martes, 03 de Septiembre del 2024

Ya tiene fecha de apertura la planta de bioplásticos modelo ubicada a pasos de Funes

Es pionera en Latinoamérica y entre sus objetivos está producir bioplásticos a partir de bacterias alimentadas con derivados del aceite de soja.

Roldán se prepara para la inauguración de una planta revolucionaria en la producción de bioplásticos, impulsada por la empresa Bionbax. Esta iniciativa, pionera en Latinoamérica, se destaca por su interés en la sostenibilidad, utilizando bacterias alimentadas con derivados del aceite de soja para generar bioplásticos biodegradables. La planta, ubicada a poca distancia de Funes, representa un hito en la industria del plástico en la región.

Gabriel Fernández y Ezequiel Sala, los visionarios detrás de Bionbax, transformaron un concepto innovador en una realidad tangible. "Este proyecto no solo es una fusión entre la ingeniería mecánica y la biotecnología, sino también un firme compromiso con las prácticas ambientales sostenibles", expresaron a InfoFunes. La planta es descrita como un "feedlot de bacterias", una metáfora que resalta su capacidad para convertir materias primas orgánicas en plásticos amigables con el medio ambiente.

A su vez, señalaron que la primera etapa de la planta, que estará finalizada a principios de 2025, se centrará en la producción de pellets, pequeñas esferas de plástico que servirán como materia prima para diversas aplicaciones industriales. "Vamos a producir un pellet que se utilizará en distintas versiones: una lista para inyectar sorbetes, vasos y bandejas; otra para laminar y fabricar bolsas o packaging".


Bionbax ya se encuentra en negociaciones avanzadas con varias empresas de la zona, dado que la ciudad posee una industria relevante en los sectores de inyección y laminado de plásticos. La planta de Roldán se presenta como una fuente clave de materia prima para estas industrias, que buscan alternativas más ecológicas y sostenibles para sus productos.

La construcción de la nave requirió una inversión de aproximadamente 10 millones de dólares, y aunque la capacidad inicial es de 80 toneladas mensuales, los fundadores ya tienen en mente un ambicioso plan de expansión. "Como planta productiva chica, estamos haciendo un prototipo enorme", comentaron y expresaron su intención de replicar el modelo en otros países de Latinoamérica. "Nuestro sueño es que esto tome un tamaño gigantesco, que se transforme en una gran destilería, con la magnitud de una petroquímica".

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