Un siglo de historia y elaboración artesanal: llega a Funes una icónica heladería fundada en España

Touche de Crème, la tradicional heladería artesanal con raíces en Europa e instalada hace años en Rosario, desembarcará en agosto su primer en Funes. Fundada en 1919 en León, España, por Antonio Rivera, la marca familiar lleva más de un siglo perfeccionando el arte del helado. En sus orígenes, Antonio elaboraba cremas heladas guiado por su madre durante los inviernos de su ciudad natal. Con el paso de los años, la familia emigró a Argentina y se estableció en Zavalla, donde se instaló la primera heladería, que pronto se convirtió en un ícono local. Así llegó tiempo después a Rosario y ahora va por la expansión regional.

"La tradición continuó con Aníbal, hijo de Antonio, y luego con Manuel, bisnieto del fundador, quien desde los 11 años se involucró en la producción. En 1995 asumió la conducción del negocio y en 2013 abrió las puertas de Touche de Crème en Rosario", explicaron los responsables de la firma en diálogo con InfoFunes. Hoy, sus hijos Tomás y Tiago representan la quinta generación de heladeros, aportando una mirada joven sin alterar la esencia artesanal que define a la empresa.

Mantenerse vigente durante 106 años en un rubro tan competitivo como el de los helados no es tarea sencilla. "Lo logramos apostando a la fidelidad con nuestros valores fundacionales. Desde nuestros inicios, priorizamos la elaboración artesanal con ingredientes naturales, sin esencias ni aditivos artificiales, y con una premisa clave: el helado debe estar recién hecho. Nuestra fábrica trabaja los 365 días del año para garantizar esa frescura", explicaron.

De este modo, aseguraron que la evolución de la marca se dio sin seguir modas ni tendencias del mercado. En lugar de incorporar agregados artificiales, se apostó por resaltar los sabores originales de cada crema. Así, propuestas como la crema Chai permiten distinguir cada ingrediente con claridad, desde la canela hasta las cascaritas de naranja. Esa búsqueda de pureza y sencillez fue uno de los pilares que consolidaron su identidad.

La apertura en Funes responde a una necesidad concreta, cada vez más clientes de esa ciudad se acercaban hasta Rosario para adquirir sus productos. En ese sentido, comentaron que la elección del Mercado Don Bosco como nueva sede responde al crecimiento demográfico de la zona y al desarrollo sostenido de nuevos barrios y familias que valoran lo artesanal. El nuevo local contará con atención al público y servicio de delivery, replicando el modelo de calidad que la marca sostiene desde sus inicios.

La expansión forma parte de una estrategia basada en un modelo de franquicias no tradicional, orientado a conservar el espíritu original de la marca en cada punto de venta. Paralelamente, la empresa se prepara para trasladar su fábrica a Avenida Pellegrini, en Rosario, un paso clave para acompañar el crecimiento sin resignar los estándares de elaboración artesanal.

La nueva sucursal en Funes abrirá sus puertas en agosto, con la expectativa de estar plenamente operativa en septiembre.

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