Son un grupo de amigos y hacen una revista que trabaja por y para los animales

Comenzaron siendo ocho amigos que, un año después de terminar la secundaria, decidieron arrancar un proyecto editorial solidario. Hace tres años crearon PetNow, una publicación que empezó siendo una “revistita” y que hoy, al mando de los tres amigos que sostuvieron el proyecto, se posiciona en el rubro y ofrece una cuidada edición que tiene como objetivo concientizar sobre el cuidado animal y brindar toda la recaudación a organizaciones que rescatan animales. 

Además de los tres o cuatro mil lectores fieles de Funes, PetNow pegó un salto enorme en cuanto audiencia cuando optaron por convertirse en revista digital y sacaron el mejor provecho que las redes sociales pueden dar: traspasar barreras geográficas. Ahora, los leen en Australia, España, Bolivia, Venezuela, Albania y Alemania. “Fueron encontrando la revista desde las redes sociales y nos leen desde allá”, cuenta Isaac Moreno, uno de sus impulsores.

Aylen Pisani, Julián Pagani y el siguen al frente del proyecto y le dan vida y movimiento a través de su página web www.petnow.com.ar y sus redes sociales en Instagram y Facebook. Los tres tienen veintipocos años, y una vida cargada de actividades con sus trabajos y estudios: Administración, Letras y Diseño Gráfico. Un combo de habilidades que combinan de la mejor manera para que la revista sea cada vez más atractiva y rentable.

¿Cuál es la clave por la que el proyecto de estos jóvenes se sostuvo estos tres años y sigue creciendo? “Desarrollamos mucho la idea de la comunidad y tratamos de que haya una interacción a través de las mascotas de nuestros lectores. La gente nos cuenta sus historias, y nosotros tratamos siempre de contar en nuestras notas las historias de los animales rescatados, tratando de generar conciencia”, cuenta Isaac.

La revista fue creciendo, literalmente. “La versión digital llevó a re formular la edición completa de la revista: pasamos a hacerla en tamaño A4, con portada a color, con cambios estéticos grandes. Mucha gente nos tenía como la “revistita de animalitos”, pero fuimos creciendo y lo mostramos también en la edición. Somos una revista que busca concientizar y por suerte lo hemos logrado”.

Los tres tienen su corazón mascotero a flor de piel. El proyecto dona sus ganancias a asociaciones que trabajan por los animales. Colaboran con Madrinas Independientes de Rescataditos, un grupo de vecinas proteccionistas de la ciudad, y además, no pierden de vista su verdadera misión: “somos proteccionistas editoriales”, tal como se definen. 

“Nos consideramos proteccionistas, con una batalla particular desde la comunicación. A través del proteccionismo editorial logramos cambiar la mentalidad de la gente, para que esté más informada y entienda cada vez más del tema”, explica el joven sobre la tarea que realizan desde hace años y que ya lleva 24 ediciones, algunas mensuales y otras bimestrales. Además, dos números especiales y una comunidad digital de miles de seguidores.

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