Municipalizar, la clave del Operativo Remontar del peronismo funense
Jakubowski fue la más votada en las PASO, pero el peronismo perdió por casi quince puntos a manos de Juntos x el Cambio. Gestión, esquivar lo nacional y Santacroce al frente para levantar a la secretaria de salud, la receta para remontar
Pasaron las PASO. Las primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias que se desarrollaron a mediados del mes pasado permitieron conocer la opinión de los funenses y en consecuencia trazaron hojas de ruta con nuevos objetivos en los comandos de operaciones de cada una de las fuerzas políticas locales. La victoria de Gabriela Jakubowski en el nombre contra nombre, el reacomodamiento de fichas que produjo la victoria con autoridad de Nacho Rímini por sobre Ana Martelli en la interna de JxC, que a la postre le sacó casi quince puntos al Frente de Todos, el desinfle de un Frente Progresista que ya no es lo que era producto de errores propios pero también víctima de una nacionalización de las elecciones locales que acarrea una polarización rabiosa son factores que alteran los planes y permiten hacer una calibración fina de los cañones de cada búnker de cara a las elecciones generales de noviembre.
El desafío más atrayente lo tiene el oficialismo. En Angelomé y Santa Fe creen que Gabriela Jakubowski hizo una “gran elección”. Los números avalan: es la mejor cosecha del peronismo en más de una década, sacando la victoria de 2019. “Gabriela era una debutante y le sacó mil votos a Rímini, que fue cuatro años concejal, fue candidato a intendente y tiene un apellido que pesa”, dimensionan en el peronismo. Sin embargo, la gran elección de la actual secretaria de salud no alcanzó para transformar a Funes en una excepción al derrumbe peronista que tuvo lugar en todo el país: el Frente de Todos quedó a casi quince puntos de JxC. Por eso, en el corazón de la Municipalidad afinan los detalles del Operativo Remontar.
Para el diseño del Operativo Remontar el oficialismo primero hizo un diagnóstico de las causas del resultado de septiembre. Funes siempre es difícil para el peronismo, más aún cuando las elecciones provinciales y nacionales no se desdoblaron y hubo un castigo del votante al gobierno de Alberto Fernández que se hizo extensivo a las gestiones provinciales y municipales de todo el país. En los despachos más importantes del peronismo funense circula una encuesta que le da 55% de imagen negativa al gobierno nacional, sin contar a los barrios cerrados, donde vive una porción nada despreciable del electorado mayormente opositor al gobierno nacional. El peso negativo del sello en Funes, entonces, es reconocido en voz baja en el oficialismo local pero con una salvedad, un ejercicio de honestidad brutal: “el sello nos tira para abajo, es cierto, pero es el mismo sello que nos permite ir a Buenos Aires y traernos 600 palos para una obra de cloacas, por ejemplo, así que no podemos ser incoherentes”.
Otra causa que fue apuntada en las huestes del peronismo es la falta de internas en el Frente de Todos. El análisis parte de la existencia de un votante que no quiere “tirar su voto a la basura” y que, al ser una elección primaria, prefirió usarlo en alguna de las internas que hubo en las demás alianzas, pero que en la elección general (la que vale, como se suele decir) optará por la opción oficialista valorando la gestión del intendente Santacroce. El mismo análisis hacen con respecto a los votantes huérfanos, es decir, los que votaron a alguna lista que no clasificó a la general, y con respecto a los que votaron a alguna opción sin chances de ganar por cuestiones de amistad o conocimiento personal. “La gente vota ganador”, resumen en el oficialismo.
El bajo nivel de conocimiento de Jakubowski entre los votantes funenses, algo lógico si hablamos de una candidata debutante, es otro de los motivos apuntados y uno de los desafíos del Operativo Remontar. En la Municipalidad creen que, a pesar de la extensa cartelería con su foto y su nombre junto con el de la secretaria de salud, no todos los funenses sabían que la candidata del intendente Santacroce era Jakubowski, ya que “los carteles los pusieron poco antes de las elecciones y Roly no participó de la mayoría de las actividades de campaña”. Sin embargo, también creen que la porción del electorado que sí sabía de la pertenencia partidaria de Jakubowski fue clave para que el resultado no fuera más holgado: “Sin la gestión que tenemos, cualquier peronista hubiese sacado menos de la mitad de los votos”.
Entonces, ¿en qué consistirá el Operativo Remontar? Municipalizar la campaña al máximo posible e intentar llevar el foco de la opinión pública a temas locales, donde el oficialismo se siente seguro producto de una gestión frenética y activa. Además, habrá una presencia casi permanente del intendente Santacroce, que “se pondrá al hombro la campaña”. Según comentan, la misma encuesta que mencionamos un poco más arriba le da un 67,7% de imagen positiva a líder del peronismo y, si bien imagen positiva no es intención de voto, la idea es trasladar al máximo posible esa percepción a Jakubowski. ¿El objetivo? No quedan dudas: remontar. “Gabriela va a ganar ampliamente las elecciones de noviembre”, aseguran. Algo parecido a lo que sucedió en 2013, que tras unas primarias en las que la interna del Frente Progresista que enfrentó a Ana Martelli y Horacio Rímini fue la más votada, en las generales el peronismo la dio vuelta y, se repiten los nombres, Santacroce obtuvo su primer triunfo electoral resonante en la ciudad.
En la oposición siguen los movimientos del oficialismo con atención. La presentación del nuevo Urbanito y del llamado mega plan de obras públicas, en donde en la pantalla que gobernaba el escenario podían verse las caras de Santacroce y Jakubowski, sirvieron de adelanto para la oposición de lo que será la campaña del peronismo. Aunque a más de un referente opositor la movida le pareció “clientelista”, todavía mantienen el silencio público ya que entienden que la sociedad la gente está más preocupada en otras cuestiones y no quiere ver a los políticos pelear por política, sumado a que confían en que los funenses hagan la misma lectura que ellos sobre la movida del oficialismo. Además, la sucesión de tres balaceras en diez días en la ciudad metió a la seguridad como uno de los primeros temas de la agenda pública y, siendo un tema tan sensible, nadie quiere largarse a hablar y quedar en offside, complicando el camino a unas elecciones en las que creen que si la oposición no comete mayores errores se quedará con la victoria.
Sottovoce, sin embargo, se intensificaron los contactos entre referentes opositores tras la reorganización que impuso el resultado de las PASO. A la lógica comunicación de Nacho Rímini, el opositor más votado, con sus rivales de interna Ana Martelli y Gonzalo Miranda Aguiar, le siguió una reunión con el presidente del Concejo Carlos Olmedo. Rivales de cara a la lucha por la intendencia en 2023, hoy Olmedo se ve forzado a trabajar para la candidatura de Rímini y así lograr que JxC se quede con dos concejales, aprovechando el desinfle del Frente Progresista como tercera fuerza en la ciudad. En ese sentido, su entrevista con InfoFunes en la que sostuvo que Rímini sería el más votado en las generales puede leerse como una prenda de paz pero para iniciar una tregua, ya que en la misma entrevista aclara que será candidato a intendente en 2023, deseo que Rímini también tiene y no esconde. Por lo pronto, se puede augurar un periodo de paz en el corto plazo de Juntos x el Cambio. La victoria ordena.
Faltan menos de dos meses para las elecciones generales, pero el oficialismo ya dio inició al Operativo Remontar. “Hicimos un buen gobierno y vamos a ganar”, aseguran. “Los Rímini, los Tomei, los León Barreto son todos iguales, ya gobernaron y la gente los conoce, no creemos que la gente quiera volver a eso”, dicen, prometiendo un despliegue de obras y gestión en toda la ciudad en busca de un triunfo necesario no solo para revalidar lo hecho y conseguir dos concejales sino también para apuntalar la proyección provincial del intendente. Son conscientes de que ser uno de los pocos peronistas victoriosos en toda la provincia le habilita lugares más importantes de la mesa provincial peronista a Santacroce y, aunque no es una empresa fácil, van a dar la pelea y avisan: “el peronismo puede perder por cualquier cosa, menos por boludo”.
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