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Viernes, 19 de Febrero del 2021

Dueño del Castillo se defiende: "No se hizo una fiesta clandestina"

El lugar fue clausurado por el municipio hace diez días tras una denuncia. Según el titular de la finca, es víctima de una "persecución económica". Su versión del hecho.

Mateo Provenzano es desde hace más de 30 años el dueño de El Castillo, una finca de alrededor de 55 hectáreas sobre la ruta 34S, en el extremo noreste de la ciudad, que días atrás fue clausurada por el municipio tras una denuncia por la realización de una supuesta fiesta clandestina. El titular de la finca niega la acusación y dice que se siente “perseguido” por la Municipalidad. “Tienen una necesidad recaudatoria, pueden inventar cualquier cosa para sacarte plata”, le dijo a InfoFunes.

No fue una fiesta clandestina”, se defendió Provenzano y dio su versión: “Mi hijo le prestó la casa a una amiga para que festeje el cumpleaños y le pidió que no fuesen más de 20 o 30 personas”, afirmó. “No fue una fiesta, no se vendía entradas, no se vendieron bebidas, sólo comieron hamburguesas al mediodía y luego se quedaron en la pileta tomando sol, no hubo música, ni DJ ni altoparlantes”, agregó.

Según Mateo, en el transcurso de la tarde llegó más gente de la esperada, pero no llegaron a ser más de 40 personas. “Mi hijo llegó hasta la casa alertado por el casero para pedirle a su amiga que termine el festejo porque había más gente de la que él le había pedido y justo llegó la policía”, contó Provenzano. “A mi hijo se lo llevaron demorado, eso fue un exceso”, afirmó.

Para Provenzano, hay contra él una “persecución económica”. “Buscan cualquier pretexto para cobrar una multa, inventan cosas”, dijo y aseguró que “el inspector municipal puso en el acta que habían más de cien personas y eso es una mentira”.

Al mismo tiempo, el titular de la finca advirtió que “es una persecución para que yo no siga creciendo en la zona”. En ese sentido, Provenzano, que es presidente de la Escuela de Fútbol Olympia de la vecina ciudad de Rosario, advirtió que tiene proyectado “hacer una filial del club en Funes” y construir un complejo deportivo en un sector del Castillo. “Parece que eso a esta gestión le molesta”, dijo.

“Pienso que me tienen que dejar de molestar y dedicarse a cuidar la ciudad”, afirmó Provenzano, visiblemente molesto con la administración municipal. Al mismo tiempo, asegura que contra El Castillo “hay envidia y hay mentiras”, en referencia a los señalamientos al lugar como posible centro clandestino de detención durante la dictadura.

“El mismo (intendente Rolvider) Santacroce dijo que fue un centro clandestino y eso es mentira, nunca se ratificó”, apuntó Provenzano y aseguró que las versiones “son cosas que corren acá en Funes por envidia, en vez de reconocer que es un lugar hermoso que se puede mejorar y que es muy bueno para la ciudad”.

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