Alerta en Funes y la región: un queso de una marca de primera línea bajo sospecha por una infección grave

Un queso que forma parte habitual de la mesa diaria quedó en el centro de una advertencia sanitaria que también impacta en Funes. El Ministerio de Salud de Santa Fe reforzó en las últimas horas el alerta nacional emitido por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) y pidió no consumir una variedad específica de queso blando de La Serenísima, asociada al riesgo de listeriosis.

La advertencia alcanza al queso Cremón doble crema, de 500 gramos, correspondiente al lote 2703, elaborado el 3 de julio de 2025 y con fecha de vencimiento el 11 de septiembre de 2025. El producto fue fabricado por Mastellone Hnos. S.A. en su planta de Trenque Lauquen, provincia de Buenos Aires, y quedó bajo la lupa tras la detección de la bacteria Listeria monocytogenes, según un informe técnico del Senasa que motivó la intervención de la Anmat.

Si bien el queso ya se encuentra fuera de su período de aptitud para el consumo, desde la cartera sanitaria provincial advirtieron que podría existir un riesgo residual en aquellos casos donde el producto haya sido conservado congelado o almacenado en freezer. Por ese motivo, se recomienda que quienes aún lo tengan en su poder, ya sea fraccionado o congelado, se abstengan de consumirlo, especialmente personas embarazadas o con defensas bajas.

La listeriosis es una enfermedad causada por la bacteria Listeria monocytogenes, presente en la naturaleza y capaz de transmitirse a los seres humanos a través de alimentos contaminados. Uno de los aspectos que más preocupa a los especialistas es que puede multiplicarse incluso en frío, dentro de la heladera, y que su período de incubación puede extenderse hasta 70 días.

En la mayoría de los casos, los síntomas son leves y se manifiestan como malestar gastrointestinal, fiebre, náuseas o diarrea. Sin embargo, en personas de riesgo puede derivar en cuadros graves, como infecciones en sangre, meningitis o incluso abortos.

Los alimentos más frecuentemente asociados a esta bacteria son lácteos no pasteurizados, fiambres, embutidos, vegetales crudos y pescados crudos o ahumados. La buena noticia es que la bacteria se elimina con una correcta cocción, aunque no sucede lo mismo con los productos que se consumen directamente, como los quesos blandos.

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