Llegó al City y se cruzó a los ladrones que le desvalijaban la casa
<p>Los increpó, los delincuentes lo amenazaron y escaparon, pero el propio vecino los siguió hasta cerca del Liceo. Ocurrió ayer a la tarde.</p>
Un insólito y lamentable hecho tuvo lugar poco después del mediodía de ayer en barrio Funes City. Gonzalo, un vecino de la zona, llegó a su casa y se encontró con un vehículo utilitario de culata en su cochera en el que dos malvivientes estaban cargando sus pertenencias. Los increpó, los delincuentes lo amenazaron y escaparon, pero el propio Gonzalo los siguió hasta cerca del Liceo Aeronáutico Militar.
“Llegamos y vimos el portón abierto. Quisimos ingresar con el auto y vimos un auto de culata estacionado dentro de la cochera. Quedé con el auto obstruyéndole la salida y vi dos tipos cargando mis cosas: un equipo de música, un plasma. Cuando nos vieron, uno se agacha, busca una pala y viene a amedrentarnos. Entonces, para resguardar la seguridad de los que estábamos en el auto, estaba con mi mujer y mi nieta, metí marcha atrás y nos fuimos, llamando a la policía”, relató Gonzalo.
Pero no terminó ahí: “en esto veo que salen por Rondeau, entonces los empecé a seguir por una calle paralela hasta Tucumán. Doblan para el lado de la ruta y nos cruzan por delante. A todo esto, nosotros indicándole a la policía por dónde íbamos. Se metió por Buenos Aires, llegó a Elorza, se fue metiendo por calles, llegó al semáforo de la plaza y nosotros quedamos justo atrás de ellos. Cruzaron la ruta, los seguimos, se metieron por calles de tierra, y en un momento doblan cerrado y frenan. Por precaución esperamos diez segundos y cuando finalmente doblamos ya no los vimos más”. Insólito.
“La policía nos pidió que volvamos a casa mientras trataban de ubicarlos, les pasamos el número de patente pero nos dijeron que siempre las cambian o la adulteran y que eso no los iba a llevar a ningún lado. A casa vino el patrullero con cuatro policías, vieron la casa y nos dijeron que cualquier novedad nos avisaban”, relataron las víctimas. “También, tipo 23 horas, llegó la Policía de Investigaciones a buscar huellas pero ya habían tocado todo, estuvieron viendo la puerta que estaba barreteada, las huellas estaban barridas y no se pudieron sacar, sacaron un par de fotos y se fueron”, relataron las víctimas.
¿El botín? Dos televisores, centros musicales, notebooks, dvd, control remoto, alhajas, celulares. Casi que desvalijaron la casa. “Estuvieron mucho tiempo pero los agarramos justo”, cerró Gonzalo.
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