"Tienen plata para tantas gansadas y no para una guardia pediátrica"

Los concejales Carlos Olmedo (PRO) y Roly Santacroce (PJ) protagonizaron un fuerte cruce, corolario de una sesión plagada de tensiones como fue la del martes por la noche. El motivo fue la ordenanza que insta al ejecutivo a disponer guardias pediátricas en los centros de salud locales, presentada por el propio Santacroce hace más de un año, aprobada por el cuerpo legislativo de entonces (integrado por el ahora intendente Diego León Barreto) y nunca instrumentado.

Santacroce ha insistido con este tema en el último año, pero esta insistencia recrudeció en las últimas semanas, principalmente desde la visita del secretario de Gobierno Ezequiel Fernández de Salvi al Concejo. La respuesta es siempre la misma: no hay dinero para instrumentar una guardia pediátrica de 20 a 8. La sesión del martes no fue la excepción, aunque tuvo un final abrupto.

El primer comentario de Santacroce fue durante el período en que el cuerpo legislativo se declaró en comisión. Allí, aprovechó para reclamar por la puesta en marcha de la ordenanza y logró que se apruebe una moción para que la secretaria de Salud Ayelén Proos asista al Concejo a hablar del tema.

Luego, en las manifestaciones libres, Santacroce tomó la palabra y llegó a decir: "Es uno de los días más tristes de mi vida política en Funes. Yo no sé cómo el grado de insensibilidad de no tener un pediatra", pero cortó abruptamente su exposición ante una supuesta risa burlona del presidente Olmedo, quien lo negó y dijo que solo le parecía inútil hablarlo nuevamente luego de haberlo charlado en comisión y ese mismo día por la mañana.

Esto no fue suficiente para Santacroce, quien se paró dando la sensación que abandonaba la sesión, pero elevó el tono para decir: "Tienen plata para tantas gansadas, para aumentarse el sueldo, y no 45 lucas por mes para una guardia pediátrica. A la gente se le puede morir un pibe hoy. Lo voto él hace un año y medio", señalando la banca que en ese entonces pertenecía a León Barreto.

Al mismo tiempo, Olmedo intentaba tapar esos dichos elevando más el tono, pero no refiriéndose al tema, sino dando por cerrada la exposición de Santacroce y posteriormente la sesión.