Miércoles, 25 de Septiembre 2024
Lunes, 07 de Marzo del 2016

De La Quiaca a Funes, en bicicleta

<p>Daniel Aimetta y su amigo Víctor Hugo Olmos se embarcaron en una aventura inolvidable: dos mil kilómetros de pedaleo y anécdotas.</p>

Otra vez los hermanos Aimetta y sus locuras. Esta vez es Daniel, el colorado. ¿Qué está haciendo? Se fue junto a Víctor Hugo Olmos, un amigo de los hermanos, hasta La Quiaca, y hace diez días que recorre el norte, en un viaje que tendrá como destino final Funes. ¿El detalle? Que recorrerá los aproximadamente dos mil kilómetros en bicicleta.

 

Fernando Aimetta, su hermano y otro adicto a la aventura, habló con InfoFunes y dio detalles del viaje de Daniel y su amigo: “El Colorado es el más chico de los hermanos, es soltero, por eso puede hacer estas cosas. Siempre busca a alguien que lo acompañe, pero si no hay nadie se va solo, este año se enganchó a un amigo que también corre con nosotros y se lo llevó para La Quiaca”. Aunque no es la primera vez que el menor de los Aimetta hace este tipo de travesías: “Ya el año pasado se vino de Mendoza, el anteaño fue y vino a Córdoba, y este año encaró para la Quiaca”, contó Fernando.

 

¿Cómo es el detalle de la travesía? Fernando lo relata: "Se fueron el viernes 19 de febrero en colectivo. Llegaron el sábado a la tarde y el domingo empezaron a pedalear. Ya hicieron Jujuy, Salta, Tucumán, Catamarca y La Rioja. Hacen entre 120 y 150 km por día y paran en los pueblitos que planifican a la mañana con el mapa, duermen en alguna piecita, algún hospedaje y al otro día siguen. Encima el amigo nuestro que está con Daniel, Huguito, tiene amigos por todos lados, el otro día pararon en La Rioja y tenía amigos, en otro lado tiene parientes, siempre encuentran uno, tiene más amigos que Roberto Carlos", dice, risueño.

 

Aunque en la expedición no es todo color de rosa: "Están bien, aunque tienen días jodidos, el otro día tuvieron un viento en contra muy fuerte, eso les dejó hacer 80 kilómetros nomas, porque vienen con toda la alforja, todo el equipaje, que es pesado. En Belén, Catamarca, agarraron un camino de ripio y eso los retrasó, pero otro día viniendo de Salta, tenían una parte de bajada e hicieron 160 km en un día. Allá hay viento zonda, días de mucho calor, otros de mucho frío. Acá si lo querés hacer entrenando podés hacer 100 kilómetros en tres horas, tres horas y media con la bici sola, pero allá tenés que estar tranquilo porque al otro día tenés que hacer lo mismo, y al otro lo mismo, además del peso del equipaje", explica, erudito en el tema.

 

La comida y la planificación son fundamentales: "Desayunan bien a la mañana, cuando también planifican el camino del día y hasta donde quieren llegar. Llevan mucha hidratación y algunas barritas de cereal en el equipaje, porque allá a veces hay 100 kilómetros en los que no hay nada, ni un pueblito. Paran en algún lado a almorzar, siguen un cacho más a la tarde".

 

Acá en Funes, sus hermanos, amigos y familiares los esperan ansiosos: "Calculan 20 días de viaje para los dos mil kilómetros, en unos 8 o 9 días estarán llegando". Pero llegan y no los esperará un descanso reparador: los Aimetta no paran nunca. Así como en 2014 corrieron una ultra maratón en las dunas de Fiambalá, Catamarca, este año no será la excepción: los cuatro hermanos (Marcelo, Fernando, Martín y Daniel) asistirán a algunas de las más exigente maratones y ultra maratones en Córdoba, y ya miran con cariño una espina clavada: "Capaz que el año que viene corremos de vuelta La Misión, en Villa La Angostura, que no pudimos terminar los 160 km el año pasado, por montaña. Queremos la revancha". Dicho y hecho, no paran nunca.