Miércoles, 25 de Septiembre 2024
Lunes, 20 de Julio del 2015

Amigos en el camino

<p>Nicolás Criscenti partió junto a dos amigos hace 4 meses rumbo a una aventura por todo el continente a la que bautizaron “Caminando Sueños”. Tras recorrer el noroeste argentino, Chile y Bolivia, desde Perú cuenta, en primera persona, los kilómetros recorridos a dedo, los amigos ganados en viaje, y el gran sueño de llegar a México.</p>

Yo tenía muchas ganas de hacer un viaje así, desde hace mucho tiempo, lo estaba organizando solo hasta que conocí a Victoria Frasson, de 22 años (cumplió 23 en marzo, en pleno viaje) y quiso sumarse a mi aventura. Unos días después mi amigo Ángel Granato, de 25 años, me dijo que le gustaba mucho mi idea de viajar y también se unió.

Fuimos preparando todo, planificando como sería el viaje. Tuvimos la idea de crear la página "Caminando sueños" en Facebook como para poder unificar todas las fotos y el relato de nuestra aventura, así nuestros amigos, familia, estarían y están en contacto con nosotros. El 9 de marzo partimos en tren de Rosario a Tucumán, 19 horas de viaje.

Visitamos San Miguel de Tucumán, Tafí del Valle, Amaicha del Valle y las Ruinas de Quilmes. De ahí nos fuimos a Cafayate (Salta), recorrimos muy lindos paisajes como La garganta del diablo, La quebrada de las conchas, el anfiteatro, entre otras. De ahí partimos a Salta capital, nos hospedamos en la casa de una amiga que conocí en otro viaje al norte. Estuvimos 5 noches en su departamento. Quiso unirse a nuestro viaje por unos días, así que de Salta salimos 4 personas con las mochilas. Ahí fue cuando decidimos empezar a hacer dedo o autostop.

De Salta pudimos llegar a San Salvador de Jujuy en un mismo día, subiendo a distintos autos y camiones. Tomamos un colectivo directo a Purmamarca, donde nos quedamos 2 noches. De nuevo en la ruta, separados en 2 parejas, seguimos con el dedo. Nos levantaron 2 autos y nos dejaron en las salinas grandes de Jujuy (íbamos camino a San Pedro de Atacama - Chile). Logramos llegar a Susques, el último pueblo de Jujuy antes de la frontera con Chile, ahí nos quedamos a descansar porque se nos vino la noche. Armamos las dos carpas en la calle, al reparo de un camión que nos había llevado hasta ese pueblo y que también se quedaba a dormir.

Al día siguiente seguimos con el dedo, hasta que pudimos cruzar la frontera en 3 autos distintos y por fin llegamos a San Pedro de Atacama, el desierto más árido del mundo. Ahí nos quedamos 4 noches en un camping, acampando hasta que decidimos seguir viaje, nos despedimos de Agustina que se volvía a Salta. 

El próximo destino fue Iquique donde solo nos quedamos 1 noche y salimos a Oruro - Bolivia, en colectivo. Luego de Oruro a La Paz, donde conocimos a una chica de Brasil (Patricia) y se nos sumó al viaje. De La Paz a Copacabana y de ahí en bote (2 horas de navegación) a La isla del Sol, en el lago Titicaca. Ahí nos quedamos 3 noches acampando en la playa, ¡hermosísimo lugar! A la vuelta conocimos a Jeremy, un francés que también se unió al viaje (ya éramos 5)

Decidimos volver y ya cruzar a Perú, el primer destino fue Puno, donde solo hicimos el tour a la isla de Los Uros. Es una comunidad que vive en islas flotantes artificiales, también en el lago Titicaca, del lado Peruano. Y partimos a Cusco, donde nos quedamos 15 días, fuimos a Machu Pichu y disfrutamos de esa hermosa ciudad. Ahí Patricia y Jeremy siguieron su camino.

Otra vez decidimos hacer dedo, con la suerte de que a los 15 minutos de llegar a la ruta, nos cargó un camión lleno de maderas, tardamos 11 horas en hacer 400 kilómetros y nos dejó en Chalhuanca. De ahí otro camión a Nasca, esa misma tarde otro camión a Ica, donde nos quedamos 2 noches en La Huacachina (un oasis en medio del desierto). Volvimos a la ruta y 2 horas después nos levantó un señor muy buena onda y nos comentó que tenía hoteles en Ica y en Pisco (70 kilómetros más arriba).

Resultó ser un hombre demasiado hospitalario y nos alojó en su hotel con piscina, bar, el mar a 300 metros, ¡todo gratis! Su familia nos cocinaba siempre, paseábamos, un maestro. Estuvimos 15 días y decidimos seguir el camino.

Se contactó con un amigo de Lima que también tiene hoteles y hostel, así que nos esperaba. Otro camión nos llevó directo de Pisco a Lima. Llegamos al barrio Miraflores, donde está el hostel donde estamos actualmente y nos recibió Max, el dueño. También todo gratis, porque como el hostel está en remodelación, ayudamos a los albañiles y somos los caseros, o sea, le cuidamos las instalaciones.

Max nos contactó con la señora Inés y ella nos consiguió trabajo en otro hostel que está a 4 cuadras, donde se hospedan únicamente israelitas. Ahí cubrimos turnos de limpieza, cocina y recepción. La idea es irnos a Ecuador el 28 de julio. Y el objetivo del viaje es llegar a México, con muchísima paciencia. Ahora recibimos a 2 hermanas de Ángel, que nos vinieron a visitar (Teresa y Angie) y en septiembre se une al viaje mi hermana Ana Laura.