#NiUnaMenos: Funes adhirió con una marcha histórica

Cerca de las 18 del miércoles 3 de junio, poco a poco los vecinos comenzaron a concentrarse en la Plaza San José, en el corazón de Funes. La convocatoria a cargo de la Red de Mujeres Funenses, bajo el lema #NiUnaMenos de alcance nacional, reunió a muchas mujeres, y también hombres, de diversas edades, sin banderas políticas, y con muchas cosas por decir.

Los presentes iniciaron la concentración antes de las seis de la tarde con una pintada de carteles con mensajes contra la violencia de género, la prohibición del aborto y a favor de la reglamentación y las políticas que sostengan la Ley N° 26.485. La gente, en pequeños grupos, murmuraba acerca del motivo que los reunía allí de la mano de las más diversas opiniones y propuestas respecto a la problemática que atraviesa a toda la sociedad argentina. 

Entre la gente, las organizaciones repartían volantes y algunos candidatos a intendente y concejales conversaban con los vecinos. Entre esa suma de voces superpuestas, las convocantes tomaron la posta, y allí, en el Monumento al Ciudadano Anónimo en medio de la plaza, y sin micrófono, enunciaron la motivación de este evento. “¿Entendemos todos qué es lo que realmente nos une en esta marcha?”, comenzó a viva voz una de las integrantes de la Red de Mujeres, el discurso principal del encuentro con el objetivo de dejar en claro que la lucha que se lleva a cabo día a día es respecto a la inmensidad del alcance de la palabra ‘violencia de género’, que no es sólo la violencia física, sino también “cada palabra que humilla y defenestra a la mujer”. 

Porque la meta del #NiUnaMenos a nivel nacional y local es impulsar un cambio social y sobre todo judicial. Los vecinos presentes, se animaron a intervenir al discurso y provocaron así el debate acerca de las actitudes sociales respecto a hechos de violencia. “El vecino de ciudades como Funes, que aún tiene alma de pueblo, tiende a no involucrarse cuando conoce casos concretos de violencia de género”, coincidieron varias mujeres. “Incluso hay personas que se unen a esta marcha ejercen violencia machista todos los días y no lo saben”, coincidieron Wanda y Guillermo, dos jóvenes que asistieron con sus mensajes escritos en papel. A lo largo de la pequeña charla las intervenciones de las personas dieron lugar a discrepancias entre los presentes, a reclamar por la falta de profundización del Programa Municipal de Asistencia Familiar que ayuda a sujetos en situación de peligro, entre otras.

Cuando caía la noche, se propuso hacer la marcha simbólica alrededor de la plaza, a la que finalmente se unieron todos los presentes llevando los carteles realizados momentos antes. En el cuerpo de la marcha, se escuchaban opiniones, historias conocidas de casos de violencias, propuestas políticas. Al desconcentrarse, cerca de las 19.15 horas, el concepto de violencia de género ya no debería ser la misma idea superficial que sobresalía al principio.

Una mujer que se acercó a la multitud, le volvía a explicar el motivo de la concentración a su hija pequeña que miraba con atención toda la situación. Y es esta la conclusión que queda dando vueltas en el aire: ¿Y si la cosa no empieza por casa, por dónde empieza entonces el cambio?