Sábado, 11 de Enero 2025
Viernes, 17 de Abril del 2015

Rossetti reflota su “frutilla del postre”

<p>El desarrollador adelanta su intención de volver a la carga con el proyecto para la planta de silos, ubicada en el ingreso por autopista.</p>

¿Por qué tomó la decisión de apartarse de la administración de los barrios cerrados San Sebastián y Funes Hills Miraflores?
 Es parte de cerrar un capítulo de mi vida, son proyectos que ya están terminados, fueron absolutamente vendidos, son etapas cumplidas. Estoy muy agradecido con toda la gente de los barrios por la confianza que me han dado durante más de 15 años de administración. Me quedo en (el club de campo) Kentucky por ahora, porque es dónde vivo, es donde más puedo ser eficiente, sentía que ya no iba a tener la misma motivación para llevar adelante una comunidad como los barrios. Además, en Kentucky se viene el comienzo de la obra de cloacas. Los vecinos han tomado más con la participación en los Consejos y es tiempo de dar un paso al costado. Y personalmente, en 2015 quiero hacer una reestructuración de mi tiempo, sacándome cosas que me restan tiempo y estar preparado y motivado para una posible ola de inversiones de nuestro grupo en desarrollos que uno dejó encarpetadas hace cinco, seis años, por falta de un contexto amigable para desarrollar.


 ¿Piensa reflotar el proyecto para la planta de silos, ubicada en el ingreso a la ciudad por la autopista?
 Hay varias ideas, no hay techo en Funes para desarrollar ideas, el techo lo pueden poner las normas. Tenemos varios bancos de tierra con posibilidades de desarrollo, una es en el Área Industrial (que el Concejo aun no aprobó), otra donde está la planta de silos. Siempre tuvimos en carpeta lo que yo llamaba la frutilla del postre, la planta, porque si lo ves desde un plano es un área central, donde se puede desarrollar todo un área de servicios, comercial, condominios, de salud, educación. Toda un área que descongestione el Funes actual, muy americana, con playa de estacionamiento, que sea algo amigable y para toda la región. Porque hay más de 20 mil lotes en la región, en los cuales está instalándose gente. A todos ellos hay que darles servicios, para que no tengan que viajar a Rosario.


¿Cuándo presentaría el proyecto?
 Estamos afinando cosas en cuanto a la idea que tenemos, luego se verá. Esto está supeditado a ver el clima que creen los políticos locales sobre todo y nacionales para inversores en el futuro. En este contexto actual todavía no es algo que motive, uno no disfrutaría hacer las cosas en este contexto. Pero hay expectativas de que cambie esto, que mejoren los tiempos que vienen, nos preparamos para eso. Y si no se da, seguiremos con lo que hacemos, la parte agropecuaria, de servicios.


¿La idea es desarrollar todo el predio de 35 hectáreas?
 Sí, siempre hablamos del desarrollo de toda un área, no solo las 35 hectáreas sino incluyendo también terrenos aledaños y teniendo en cuenta, a lo mejor, las 8 hectáreas que tiene la Municipalidad en la esquina, donde Gendarmería utiliza un pedacito, para que esa parte se valorice para la comunidad. Si sigue adelante la idea, se presentará y debatirá. Pero va a ser muy innovadora y va a necesitar de mentes abiertas de quienes dan las aprobaciones, no de mentes obtusas. Si no, no se va a poder a hacer nada.  


¿Cuál es la visión que tiene  del Funes actual?
 Sigo teniendo una visión preocupada de Funes, sigue el crecimiento privado superando al crecimiento de la infraestructura y los servicios. No se puede demandar que los desarrolladores hagan lo que tienen que hacer las empresas de servicios, sino se hacen inviable los proyectos y se encarece el valor final al consumidor. Tiene que tener todo cierta lógica. Creo que estoy igual que la mayoría de la población, esperando que los políticos se pongan las pilas y hagan lo que tienen que hacer, la esperanza es lo último que se pierde, la posible ola de cambio que se viene la estamos esperando con esperanza. Ahora estoy participando intensamente en la comisión de la Asociación Empresaria de Funes (AEF), junto a Germán Nocera (Funes Mall), Alejandro Piscione (Howard Johnson), Walter Camerano (Bordafax), desde dónde queremos hacer nuestro aporte el crecimiento de la ciudad.


¿Cuáles son los desafíos para el Funes del futuro?
 Hay que mejorar la conectividad y ciclística, esta ciudad debería ser un paseo para andar en bicicleta. De hecho, tenemos muchos emprendimientos, como Bici Cultura, con Marito Parodi, que son espectaculares, pero no tenemos bicisendas, no tenemos seguridad para andar en bicicleta. Un chico de 15 años que viene de Kentucky, Funes Hills al pueblo no viene, porque es muy inseguro. No tenemos recorridos seguros para andar en bicicleta. Hablamos mucho de desarrollar la parte comercial, pero no tenemos conectividad. Además, no tenemos lugares para estacionar, se hacen desarrollos sin pensar en lugares para estacionamiento, esto es algo importante. Por ejemplo, no vi nadie que haya presentado un proyecto para iluminar la autopista Rosario – Córdoba entre Funes y Roldán. Estamos hablando del acceso más importante de la segunda ciudad más importante del país. Ojo, hay cosas que se están haciendo, estamos ahora con la obra de cloacas, pero no alcanza. Avanzamos dos pasos, pero el crecimiento de Funes da cuatro. Tenemos que ponernos más las pilas, convocar a gente que vea esto, no poner tantas trabas y tener un proyecto de un Funes más armónico. Hay que dejar de instalar cosas tan estúpidas como el funense y el no funense. Y en materia de seguridad, que es lo que más preocupa, hacer lo que se puede, no es un ámbito municipal  cien por ciento, pero hay hacerlo eficientemente. No hay que hacer inversiones para que parezca un circo romano, nada más que para decirle a la gente que pusimos muchas más cámaras ¿pero dieron resultado? Creo que a lo sumo sirvieron para detectar algún accidente de tránsito y nada más. Hagamos cosas que realmente sirvan, la COE me parece una fuerza interesante, es una respuesta más que complementa a la policial. Y también es importante detenernos en las responsabilidades individuales, que la gente deje de trasladarle todo al Estado, que haga lo que corresponde en su casa, en sus hábitos, en el trato, porque hay mucha agresividad en general, no solo en Funes. Hay que hacer una tasa de índice de felicidad, eso es lo que falta, hay mucha gente que vincula la felicidad a la parte económica y no es así. Justamente, parte del cambio mío es sacarme lazos que me fui poniendo, son procesos que me gustaron, pero uno va cambiando.