Jueves, 02 de Mayo 2024
Viernes, 04 de Julio del 2014

Hermanos de la aventura

Los hermanos Fernando, Daniel y Martín Aimetta corrieron la dura Ultra maratón Fiambalá Desert Trail, una difícil carrera en medio del desierto y las dunas por donde pasó el Dakar.

Siempre que pensamos en carreras en las montañas, duatlones, triatlones o actividades por el estilo, nos enfocamos en el Team Aimetta, como a ellos les gusta que los llamen. Desde la ciudad de Funes hasta los inmensos desiertos catamarqueños han llegado estos aventureros, que como atletas ya se pasan de la raya, o sea superan todas las expectativas.

"Esta carrera la venimos preparando hace varios meses, sobre todo porque era por la arena, por las dunas donde pasa el Dakar", cuenta con entusiasmo Fernando, el mayor de los Aimetta, que junto a sus hermanos Daniel y Martin, conforman este gran equipo.

Desde Palo Blanco hasta Fiambalá, es la distancia que se atrevieron a recorrer, pasando por un terreno que nunca habían transitado, pero que sin dudas, entrenaron y se esforzaron para estar ahí y enfrentar, una vez más, los desafíos de la naturaleza.

La Ultra maratón Fiambala Desert Trail, se largó el sábado 7 de junio a las cinco de la mañana, y así comenzó la aventura. "Los primeros 35km hasta el puesto uno fuimos juntos los 3 hermanos. Después yo me adelanté y corrí hasta el km 50. Luego de siete horas de carrera empecé a caminar, siempre hidratándome y comiendo algo, pero el desierto me empezó a pasar factura y me empezaron a dar calambres" narró Fernando que continuó explicando la situación. "Me descompuse, signos de la deshidratación y acumulación de ácido láctico, así que quedé casi una hora tirado en el medio de la nada solo, acalambrado, y lleno de arena" "En ese momento me asusté, hasta que apareció un cuatriciclo y me llevó hasta el último puesto de control que estaba en el km 70" contó el atleta funense.

Comentó también que después lo atendió la ambulancia y sus hermanos llegaron, algo cansados, a quedarse con él. La decisión fue de no continuar porque no estaban en condiciones de hacerlo, más allá de las ganas con las que se habían preparado.Así ,Coli y Martin cumplieron con la enseñanza de su padre de quedarse todos juntos siempre pase lo que pase, demostrando la entereza de este equipo que no se olvida de los valores principales del ser humano.

"Mi viejo nos enseñó que lo principal es que estemos unidos, y que las dunas y las montañas van a estar siempre" explicó Fernando que se animó a contar que "terminamos en el hospital pero juntos y con ganas de revancha".

Es imposible hacer a un lado de esta aventura a uno de los amigos de la familia y nuevo integrante de este grupo, Hugo Olmos que hace varios meses se entrena duro para no desentonar, y realmente lo hace muy bien. Corrió los 27km y llegó en buenas condiciones físicas.

Estos desafíos son una página importante en el libro de la familia Aimetta que ya se prepara para la próxima competencia de esta magnitud. La misma será en Villa La Angostura. La carrera se llama La Misión y consta de 160 km. Todos ya se están preparando para que esta vez el cuerpo no tenga ganas de decir basta, sino que quiera seguir adelante llevando la bandera de una familia de hierro.