Así viajamos
Se conoció el Estudio de Movilidad que el Municipio le encargó al Instituto de Estudios del Transporte de la Universidad Nacional de Rosario. Los resultados que el trabajo arroja podrían convertirse en un faro que guíe las políticas de movilidad de la ciudad de aquí en más.
Finalmente el estudio de la movilidad que el Municipio le encargó -en junio del año pasado- al Instituto de Estudios de Transporte (IET) perteneciente a la Universidad Nacional de Rosario vio la luz.
El documento de 324 páginas, titulado "Estudio Diagnóstico de la Movilidad en el Área de la Ciudad de Funes" y elaborado en base a encuestas de origen y destino y a talleres abiertos a los vecinos, podría convertirse en un faro que guíe las políticas de movilidad de la ciudad de aquí en más.
La tarea del mismo fue conocer los hábitos de desplazamiento de la población, saber desde dónde y hacia dónde van las personas, por qué motivos y en qué horarios, para así adecuar la oferta de transporte público a las exigencias de esa demanda. A su vez, un estudio complementario sobre el tránsito, realiza proyecciones de su crecimiento y sugiere el lugar y la forma que debieran adoptar las nuevas avenidas a construir. La inquietud del Municipio fue dimensionar el impacto generado por las nuevas urbanizaciones.
Tamaños enunciados de alguna manera vienen a subsanar -al menos en este área- la histórica carencia de Funes en lo que es planificación a mediano y largo plazo. Se podría convertir así en material de consulta a la hora de pensar en el futuro de la ciudad, ya que no sólo se restringe a la movilidad en sí, sino que también indaga en los motivos -por ejemplo- por los que los funenses viajan a Rosario: trabajo, educación, salud, compras. Las conclusiones y recomendaciones son por demás de interesantes.
Diagnóstico
Uno de los primeros datos con el que nos encontramos al leer el estudio es que si bien la población funense crecio -entre 2001 y 2010- un 49,5 %, el número de viviendas lo hizo en un 92.9%; sin dudas cifras de magnitud.
El número de vehículos particulares que entran y salen de Funes en un día hábil tipo es de 41.900, significando 60.087 personas.
En base a encuestas realizadas en distintos puntos de acceso a la ciudad (Ruta 9; calles Arturo Illia, Galindo y Acceso al Aeropuerto Jorge Newbery) se refleja el predominio que tiene el automóvil al momento de realizar desplazamientos.
El ranking de conexiones viales más utilizadas lo encabeza la Ruta 9, (14.029 veh/día), seguida por la Autopista (9,356), Galindo (8.687), Avenida Illia (5.094) y el acceso al Aeropuerto (4.728).
De estas cinco conexiones, el estudio afirma que solo la Avenida Illia y el acceso al Aeropuerto muestran "buenas condiciones de confort, libertad para realizar maniobras, velocidades y tiempos de viajes". Siendo la Ruta 9 la que peores indicadores presenta, trabajando en su máxima capacidad.
En cuanto al transporte público de pasajeros (analizados en base a encuestas en unidades de Monticas/ Las Rosas [Servicio común, Semirápido y Zona 5] y Línea 133) se observa que la mitad de los usuarios no vive en la ciudad. El servicio común de Monticas/ Las Rosas es el más usado (59.7%), seguido por el 133 (26%) y el servicio zona 5 (14%).
Propuestas
Al proponer líneas de trabajo, el estudio diferencia a la Autopista y a la Ruta 9 (a las que considera "arterias de circulación troncal") del resto del ejido urbano.
Las líneas propuestas son:
- Ampliación tercer carril en Autopista
- Duplicación de la traza de la RN 9
- Duplicación de la traza de Av. Illia (Funes), Av. Calasanz (Rosario)
- Duplicación de la traza de Av. Jorge Newbery y empalme con Autopista
- Planteo de avenidas futuras que completen una red jerarquizada en Funes
- Fortalecimiento de los servicios de transporte por Bus
- Servicios encerrados de bus
- Desarrollo de un transporte ferroviario.
- Mejora de la estación ferroviaria y desarrollo de equipamiento e instalaciones para favorecer la intermodalidad (ciclovías, guardabicicletas, estacione y viaje, playas de estacionamiento para vehículos y motocicletas).
Todo lo cual deberá complementarse con una política de "generación de oferta de servicios locales de aprovisionamiento, educación, salud y otros que hagan innecesarios los desplazamientos a Rosario y la población que ha decidido trasladarse a Funes comience a complementar sus actividades localmente a fin de atenuar el impacto previsible en la red".
Uno de los puntos de mayor discusión en la ciudad es el sentido de circulación de las calles, se escuchan a menudo quejas por la "doble mano". Sin embargo, el estudio del IET muestra que en los talleres participativos se mostraron más afectos a no modificar el actual sistema, argumentando que la doble mano "permite la autorregulación de los conductores, en tanto manejan a baja velocidad, da lugar a calles calmas, y otorga prioridad al peatón y al ciclista, disminuyendo los accidentes".
Otro punto que se viene mencionando desde hace algún tiempo es la posibilidad de implementar el estacionamiento medido. Según el estudio, las participantes de los talleres aprobaron mayoritariamente la implementación de este sistema (evaluandolo primero en una prueba piloto) para permitir la renovación de vehículos estacionados, evitando que sean ocupados durante largas estadías por automóviles de empleados públicos, comerciantes y empleados de comercio.
En cuanto al transporte público, se plantea, por un lado, centralizar los flujos en los dos corredores troncales (Ruta 9 y Autopista), que "redundará en mejor frecuencia, ahorro de unidades, menor tiempo de viaje para los pasajeros pasantes, reducción de kilometraje"; y por el otro, desarrollar un servicio urbano de transferencia para los pasajeros no vecinos de esos corredores.
Los usuarios del servicio urbano deberían tener "una espera media de 7 a 8 minutos que, sumada a la espera de unos 5 minutos en el punto de transferencia o sobre la troncal, representará una mejora en el servicio para muchos de los vecinos".
Para superar un estándar aceptable de calidad, el servicio debería ofrecer dos modalidades de pago alternativas: "viaje urbano, con tarifa fija y plana, probablemente una fracción de una tarifa interurbana corta; y boleto combinación, con el que se pueda abordar el ómnibus regional directamente o contar con un descuento equivalente al costo del pasaje urbano".
En sus inicios, la frecuencia de este servicio deberá ser de 4 vehículos/hora, con una flota de 4 buses pequeños, que permitirá tener un intervalo de 10 a 15 minutos y combinar con los servicios troncales, que no deberán tener un intervalo mayor a 10 minutos.
Esas son las principales líneas del plan que, como todo plan, es una guía valiosa, pero cada proyecto deberá ser consensuado en el Concejo de la ciudad.
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