Martes, 19 de Marzo 2024
Lunes, 03 de Julio del 2017

Los Peña, la familia que corre sin parar

<p>Padres, tíos, hermanos, primos. Todos los Peña tienen algo en común: corren. Pero lo más importante: lo hacen en familia.</p>

"Esto es una fiebre", dice José Peña. Habla de la pasión que lo atraviesa: el running y las carreras de montaña. El detalle es que no está solo en eso, ya que la pasión también atraviesa a...toda su familia. Padres, tíos, primos y hermanos unidos, pero en velocidad.

 

"Arrancamos hace como seis años y no paramos, a veces más, a veces menos pero no paramos", cuenta José. "Varias veces al año salimos de viaje a diferentes lugares. Hace un mes mi viejo y mi hermano estuvieron en Fiambalá, Catamarca, les fue muy bien. Vamos yendo por todos lados", agrega.

 

Juan Peña, hermano de José, fue el primero y le encargado de contagiar a toda la familia: "mi hermano fue el primero, hace 8 años, y nos fuimos sumando. Mi viejo un día nos fue a ver correr una carrera de 50 km en Tucumán, en Tafí del Valle, y cuando nos vio llegar lloraba de la alegría. Dijo 'el año que viene la vengo a correr yo', al otro día se puso a entrenar, al año siguiente fue y la corrió. Un maestro", recuerda Cote.

 

Este sábado, por ejemplo, los Peña corrieron la carrera de montaña UTACCT en Villa Yacanto de Calamuchita, y tuvieron asistencia perfecta: Alberto y Ricardo, los hijos de Alberto Juan, Job y José, y la hija de Ricardo, Paula. Y los resultados fueron más que buenos: Alberto ganó su categoría y José estuvo tercero en la general, entre más de 700 corredores. Pero lo importante no son los resultados, sino las experiencias. "Corremos por todos lados, Catamarca, Tucumán, Córdoba, siempre que vamos de veraneo nos fijamos donde hay una carrera y la hacemos, todas las carreras de calle que hay acá las hacemos".

 

Correr es hermoso, según José. Tanto que los grandes "no paran más, es lo mejor que les pudo pasar, están chochos. Tienen 66 años y van, corren 15, 20, 30 kilómetros, son unas máquinas. Mi viejo es médico, tiene 40 años de médico, y está chocho, tiene la excusa para pasar un rato con los hijos y los viajes". Los no tan grandes, claro, siguen ese camino: "nosotros tampoco paramos más, si no corro me pongo mala onda, llego a casa un día que no pude correr y mi señora no me aguanta, me manda a entrenar. Y vuelvo contento, me baño y me voy a dormir", dice José, y agrega, para cerrar: "si la mente está sana y joven el cuerpo aguanta todo".