Día Mundial del SIDA: la importancia de adherir a los tratamientos

El mes de diciembre arranca con una tarea importantísima para la salud, un desafío que se marca cada año en el calendario con un lazo rojo que sirve para aumentar la concientización sobre el VIH en el Día Mundial del Sida. El 1 de diciembre se utiliza con dos propósitos: por un lado recordar que no se deben dejar de lado los testeos, que son gratuitos y anónimos. Por otro, algo más desafiante aún como quitar el estigma que pesa sobre las personas que viven con VIH/Sida. 

Se puede vivir con VIH llevando una vida sana si se sostienen los tratamientos adecuados. Se puede también evitar la transmisión por contacto sexual aun viviendo con VIH. Los medicamentos indicados evitan que el virus se multiplique y destruya las defensas del cuerpo; hacen que la cantidad de virus en sangre sea tan baja que los análisis no la detectan. 

Para esto es indispensable no interrumpir ni descontinuar los tratamientos antirretrovirales. Está confirmado que, si se toman de manera correcta y se mantiene la carga viral indetectable durante seis meses, el virus no se transmite por vía sexual. Indetectable es igual a intransmisible.

Por eso, adherir a los tratamientos es importantísimo. Por eso, saber quiénes deben recibirlos es indispensable. Existen en el país aproximadamente 138 mil personas viviendo con VIH/Sida, 13 mil son santafesinas, según indica el Boletín Epidemiológico VIH-Sida 2019 del Ministerio de Salud de Santa Fe. Se estima que dos de cada diez personas que viven con VIH no lo saben.

Lo que sí se sabe es que el VIH no se contagia como el Covid en el que nos piden que mantengamos la distancia. El VIH de hecho no se contagia, sino que se transmite: por vía sexual, sanguínea o vertical (de madre a hijo/a). Por lo tanto, al ser bien claras las posibilidades de transmisión, están muy claras las medidas que se deben tomar para prevenir su exposición: usar preservativos de manera correcta en cada encuentro sexual, de cualquier tipo, no compartir agujas ni jeringas si se es usuario de drogas de manera inyectable, usar material descartable o esterilizado en cualquier procedimiento que incluya un corte o punción, y controlar los embarazos.

Aun con todo este conocimiento, los testeos periódicos son insustituibles. Cada año se realizan unos 5800 nuevos diagnósticos, más del 70 por ciento en varones. Aunque la relación entre hombres y mujeres fue achicando su brecha con el transcurso de los años –en los primeros años era de 14 hombres por cada mujer y hoy se ubica en 2.5 hombres por cada mujer- la realidad es que siguen siendo los hombres la población más afectada. En cuento a las edades, el promedio de edad de diagnóstico entre los años 2006 y 2016 fue de 33 años en varones y 32 en mujeres. Sin embargo, se sabe que el virus no discrimina, ni sexo, ni orientación sexual, ni raza, ni edad. Todos podemos estar expuestos, por lo tanto, todos debemos hacernos los testeos que son gratuitos y anónimos.

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