Historias funenses: una familia que le hace frente a la vida

Su historia comenzó en en el año 2008 cuando uno de sus cinco hijos fue diagnosticado con distrofia muscular, luego de eso 3 más de ellos comenzaron con síntomas similares y también fueron diagnosticados con la misma patología.

Desde ese momento para la familia Reynoso compuesta por Gerardo J., el padre, Gisela S., la madre y sus cinco hijos: Tomás Agustín, Esteban Lucio, Santiago Jonas, Aarón Emanuel y Benjamín Jeremías, todo cambió.

“Cuándo cuatro de mis cinco hijos fueron diagnosticados con distrofia muscular empezó una vida diferente para la familia, a buscar información, a adaptarnos, a pasar el duelo, porque también tuvimos un duelo de dolor y de no entender o no comprender, pero logramos enfrentar para adelante todas las cosas”, contó Gerardo como comenzó todo.

Luego de eso la familia comenzó en la búsqueda de profesionales idóneos, y colegios que sean apropiados y se adapten a la discapacidad de los chicos, afortunadamente y después de mucho esfuerzo encontraron una escuela en Rosario llamada “Vivir y Convivir” donde los cinco hermanos pudieron cursar sus estudios. 

El más grande, Tomás de 22 años actualmente, terminó sus estudios secundarios en esa institución, Esteban de 20 cursó su último año durante este ciclo lectivo, Santiago de 17 y Arón de 16 se encuentran cursando la secundaria, y Benjamín de 12 este año terminó la primaria.

“Pasamos a ser espectadores de la discapacidad a ser protagonistas, fuimos progresando, fuimos abriendo caminos,  nos sumamos a diferentes ONG para ayudar, para servir, para brindar nuestras experiencias vividas y a participar abiertamente en charlas. Comenzamos a posicionarnos en un lugar diferente con el objetivo de servir al otro desde nuestra experiencia y no quedarnos en casa con el dolor”, explicó Gerardo como de a poco fueron superando las diferentes situaciones que se le presentaron y con ello también ayudar a otros.

Como familia pasaron por muchas cosas difíciles que unidos y con gran esfuerzo pudieron superar, los jóvenes día a día se superan a ellos mismos y nada los frena para lograr sus objetivos. El hermano más grande, Tomás, al terminar la secundaria conoció a una chica, el amor de su vida, a los dos años juntos se casaron y actualmente se encuentran viviendo juntos en la ciudad de Buenos Aires.

“Tomás encontró a su amor, y nosotros lo apoyamos muchísimo a ambos hasta que decidieron casarse el año pasado y se fueron a vivir juntos, formaron una linda familia y nosotros nos sentimos muy complacidos por las decisiones que él tomó para su vida y obviamente seguimos en contacto y siempre cuenta con todo nuestro apoyo emocional”, dijo emocionado el papá de Tomás.

Como para todos la cuarentena también fue difícil para la familia Reynoso, ya que los chicos debieron cursar de forma virtual, sin poder ver a sus compañeros o realizar sus actividades cotidianas, de todos modos lograron cumplir sus metas y Estaban se graduó de la secundaría y su hermanito menor Benjamín de la primaria, y Santiago y Aron también lograron finalizar su año escolar. 

Una familia llena de amor que supera todos los obstáculo de la vida juntos, y se dedica a ayudar a las demás personas con el objetivo de llevar esperanza y alegría a más familias.

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