En diciembre inaugura el Sanatorio de Grupo Oroño y los primeros turnos se otorgarán para enero

Siguiendo con los plazos de obra previstos, Grupo Oroño le puso fecha de inauguración a su nuevo sanatorio en la ciudad de Funes. La primera etapa del moderno edificio de 7000 M2 en Ruta 9 y Galindo se culmina en diciembre, mes en el que planean inaugurar y trabajar a puertas cerradas, dando los primeros turnos a pacientes en el mes de enero. Así lo confirmó a InfoFunes Simón Villavicencio, uno de los directivos de la institución y el arquitecto a cargo de la obra de infraestructura que aportará a la ciudad el primer centro de atención de alta complejidad.

“La idea es inaugurar y hacer un breve tiempo de trabajo en vació como se conoce a la etapa de trabajo ya con el personal y donde se corrobora que todo funcione bien aceitado para abrir las puertas al público ya en los primeros días de enero”, confirmó.

La primera etapa, para la que ya ultiman detalles, comprende la apertura e inauguración el sector de emergencias, 17 consultorios de distintas especialidades, laboratorio de análisis bioquímicos y una imponente área de diagnóstico por imágenes con resonador, tomografía, rayos, imágenes odontológicas, mamografía, ecografía y densitometría.

El edificio completo se desarrolla en unos 7 mil M2, de los cuales en enero se podrán efectivos y operativos más de la mitad, para completarse en su totalidad a fines del 2022, ya con la instancia definitiva de internación, quirófanos y maternidad.

El sector de urgencias contará con sala de shock room, cinco puestos de camas de observación para quienes precisen una breve estadía de atención que requiera internación transitoria, o quienes deban requerir atención de complejidad y esperan una derivación. Los ingresos estarán diferenciados: por Ruta el acceso principal al área de consultorios y por calle Galindo el ingreso al sector de urgencias.

Linderos a Go Kinesio, firma del mismo grupo ya vigente en la ciudad, van a trabajar como edificios separados, pero tienen conexión directa a través de los desarrollos de calles internas que contempla también la obra, para el ingreso sin dificultad de ambulancias, proveedores y demás sistemas de funcionamiento de un sanatorio que comenzará con una atención diurna pero que se convertirá en el corto plazo en un centro de atención de gran complejidad y el primero de la ciudad con internación -contarán con 30 camas- y atención las 24 horas.

Villavicencio brindó detalles de la estructura que alista su apertura: El edificio se desarrolla en Planta baja, primero y segundo piso, compuesto por una nave central y tres “peines” con distintas especialidades. La nave más el primer peine donde está el sector de urgencias en planta baja, junto al área de diagnóstico por imágenes y laboratorio, y el sector de consultorios en el primer piso se inaugurará en diciembre -17 en esta primera etapa- para estar ya operativo y programando turnos de atención a pacientes en el mes de enero. 

Arquitectura optimizada y pensada en salud

“La particularidad que tiene el edificio, es que aún con una ampliación al proyecto original, siempre se pensó como un edificio de salud. Esto significa que toda la circulación técnica, el movimiento de pacientes y los circuitos de pacientes internados, están pensados para garantizar este movimiento propio de un servicio de salud. Se pensó también un edificio que sea lo más horizontal posible, aprovechando al máximo la superficie del terreno facilitando las prácticas médicas”, detalló el arquitecto, uno de los tres profesionales a cargo de la obra, tal como de tantas otras vinculadas a servicios de salud que han desarrollado en la especialidad.

“Que cada piso esté pensado según su uso, y su construcción en módulos permite a la estructura adaptarse a cualquier cambio que se tenga que hacer. En la salud hay muchos cambios, renovación de equipos, de técnicas, por ejemplo. Ya está pensado por dónde se recambian los equipos en futuro, porque no se puede parar un sanatorio por esa logística. Desde el inicio se pensó como un edificio así, con plantas libres, donde no hay columnas que impidan la flexibilidad de los ambientes”, sumó.

También se pensó en una construcción amigable con el medioambiente, con un consumo eléctrico “súper cuidado”, con una inversión en refrigeración que es “de la tecnología más nueva que existe y es muy eficiente”. 

“Además garantiza orientaciones muy cuidadas: la nave con orientación al norte utiliza una fachada con un tipo de vidrio que es especial para esa orientación. Todos los consultorios tienen ventilación e iluminación natural a través de patios internos”, cerró Villavicencio.

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