Detalles exclusivos de Paséa, el shopping que aterrizará frente al Aeropuerto
El desarrollo contará con locales, oficinas, cines, un gimnasio con pileta, un centro médico, una universidad privada y hasta un hotel. Cómo es el proyecto.
Tras años de espera, finalmente se perfila Paséa. El shopping que se ubicará frente al Aeropuerto carretea para despegar a mediados del año que viene, pero ya se conoció su masterplan. El desarrollo comercial se construirá en el terreno ubicado frente a los hangares de la estación aérea, sobre la curva del boulevard Pedro A Ríos, e incluirá una amplia gama de locales comerciales, oferta gastronómica, cines, una universidad privada y hasta un hotel, lo que lo convertirán en un polo de actividad de primer nivel “como no hay otro en la ciudad”, remarcaron sus socios.
El shopping contará con cuatro módulos separados pero integrados, de tres pisos cada uno. Una calle perimetral rodeará el predio, parquizada y con lugar para estacionar. Sin embargo, los autos no se concentrarán allí: el proyecto comprende un subsuelo para estacionamiento, con más de 350 plazas. La idea, explicaron los desarrolladores, es optimizar el espacio y que se priorice el tránsito de a pie dentro del shopping, aprovechando la frondosa arboleda que se planifica.
En la planta baja, habrá lugar para entre 60 y 70 locales comerciales y gastronómicos. Algunos números: habrá 31 módulos comerciales, 21 góndolas tipo jardín, 9 tiendas medianas y 4 espacios reservados para restaurantes. Además, un local especial ubicado en el módulo más visible del desarrollo, más de 1500 metros cuadrados, está planificado para una casa de comidas rápidas. Aún no se definió cuál será la franquicia, pero hay dos que pican en punta en las negociaciones: una nacional y otra internacional.
De los cuatro módulos, dos -ubicados al norte y al sur- estarán ocupados enteramente por oficinas. Además, habrá otro sector de oficinas en los pisos superiores del edificio oeste, completando así casi 10 mil metros cuadrados destinados a espacios de trabajo.
Mientras los locales comerciales y gastronómicos se concentrarán en la planta baja, las distintas áreas de servicios lo harán en los tres pisos superiores. Allí, por ejemplo, habrá cuatro salas de cine, un hotel, un centro médico, una universidad privada, un gimnasio con pileta semiolímpica -una conocida cadena está cerca de ser confirmada allí- y hasta un salón de usos múltiples que se destinará a la organización de eventos.
Son tres los socios que impulsan el proyecto: la desarrolladora GM Real Estate y las constructoras Edeca y Pellegrinet. El empresario Arturo Trini, presidente de GM Real Estate, es quien aporta el predio, que es de su propiedad tras haberlo canjeado por el que está ubicado enfrente, sobre Jorge Newbery, del lado de Rosario, hace algunos años. En el marco de esa operación fue que se definieron los índices de construcción y, a cambio, GM Real Estate aportó -a modo de plusvalía- la pavimentación de todo el Bv. Tomás de la Torre.
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