Verano traidor: a estar alerta en la pileta con estos cuidados especiales
Qué normas de seguridad se deben cumplir la zona de la piscina y cómo protegerse de la exposición prolongada al sol y al cloro.
La llegada de las vacaciones de verano es inminente y con ellas el inicio de la temporada de pileta aunque, con las altas temperaturas de las últimas semanas, muchos ya se adelantaron y llenaron sus piscinas. Para disfrutar el agua a pleno se necesita acondicionarla, realizarle mantenimiento, pintarla y realizar los arreglos necesarios.
El agua debe estar limpia, es decir, transparente, que pueda verse el fondo correctamente y para eso hay que evitar la formación de verdín y la presencia de hojas e insectos, poniéndole cloro, pasando el barre fondo y haciendo circular el agua de manera constante. Al utilizarse productos con sulfato de cobre o cloro, estos pueden irritar la piel y es por ello que ante cualquier reacción alérgica, es importante salir del agua, ducharse y, siempre bajo indicación médica, tomar algún antialérgico.
Además de los cuidados para mantener el agua de la pileta en condiciones, hay ciertas medidas de seguridad que deben considerarse para que no haya riesgo alguno. Algunas de estas medidas son:
- Las escaleras de acceso y de salida deben estar fijadas y los escalones deben ser antideslizantes para evitar caídas y resbalones.
- Los niños deben ser vigilados con la mirada permanente de un adulto mientras están cerca del agua o dentro de ella.
- Toda piscina debe contar con un cerco perimetral entre el niño y el agua, a modo de barrera física. También un sistema de puerta que cierre y trabe de forma automática.
- No correr alrededor de la piscina ya que la superficie es resbalosa y puede provocar caídas
- Las antiparras sirven para evitar la irritación de los ojos debido al cloro, por lo que su uso es recomendable, al igual que no se recomienda abrir los ojos abajo del agua.
- Se deben usar protectores solares, y repetir la aplicación cada 2 horas aproximadamente.
- Para las personas que no sepan nadar, se recomienda el uso de "bracitos" y chalecos inflables y evitar la parte honda donde no haga píe.
- Tratar de entrar y salir seguido del agua, para evitar permanencias prolongadas dentro de la piscina.
Un aspecto fundamental para tener presente es que la supervisión es una de las medidas más importantes y la más eficaz, por lo que debe ser continua.
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