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Martes, 31 de Mayo del 2016

Al Jardín, en su día

<p>Se celebró el Día de los Jardines de Infantes. InfoFunes recorrió el N° 101, “José Pedroni”, el único público. Necesidades y proyectos.</p>

Vanesa Fresno - InfoFunes

El Jardín de Infantes es una de las instituciones de la sociedad en la que tanto chicos como grandes depositan más expectativas, la primer institución en la que un niño se sociabiliza más allá de la familia. A cualquier mamá o papá con hijos en edad escolar se le plantea un gran desafío a la hora de encontrar el jardín en el que depositar la confianza del aprendizaje y la contención de los más chiquitos.

 El 28 de mayo se celebra, como todos los años, el día de los Jardines de Infantes y el día de la Maestra Jardinera, InfoFunes dialogó con Miriam Donato y Ester (Piky) Caporella, directora y vicedirectora del Jardín de Infantes N° 101 “José Pedroni”, único jardín provincial oficial de la ciudad, que este año cumple 30 años de vida.

El Jardín de Infantes N° 101 “José Pedroni” funciona desde el año 1986 en la ciudad, los primeros años compartía un sector de la Escuela Fiscal Nro. 125 y en 1993 se mudó a su propio edificio, en calle Montevideo 1437, donde durante años fue ampliándose hasta llegar a contar hoy en día con 12 secciones, 6 en cada turno.

El Jardín tiene un patio enorme, con juegos, trepadores, varios árboles entre los que se destaca “Pancho”, un jacarandá que plantó el hijo de Piky Caporella hace 18 años y que hoy da sombra al sector de juegos. También tiene un salón de usos múltiples donde las seños armaron rincones de juegos, lecturas y disfraces. Sus aulas son amplias y luminosas, y en el pasillo central se ubican largos pizarrones a la altura de los chiquitos, donde dibujan con tizas de colores grandes obritas de arte.

Junto con el anexo, donde funcionan los niveles iniciales de las escuelas Nro. 1061 y Nro. 1388, el Jardín 101 es la institución provincial que más alumnos convoca, y el único que cuenta con un funcionamiento independiente en su organización, con directivos exclusivos del nivel inicial. Este año son 265 alumnos de 4 y 5 años en sus dos turnos.

Dado el crecimiento demográfico que viene aumentando año tras año, este año el jardín se organizó en 4 secciones de 5 años y dos de 4 a la mañana, mientras que en el turno tarde son 3 salas de 5 años, 2 de 4 años y una sala múltiple. Años atrás el Jardín 101 contaba con cupo para salita de 3, pero desde el 2014, debido a la demanda en su currícula, no pudieron abrir ese espacio para los más chiquitos. “El crecimiento demográfico que aumenta año tras año, se plantea como una problemática” cuenta Piky Caporella, la vicedirectora del Jardín que volvió a la institución en la que trabajó desde sus inicios como docente, luego de 9 años de trabajo en cargos directivos en otros jardines.

Además de Miriam y Piky, el plantel escolar está integrado por 12 docentes, 3 asistentes escolares y 3 maestras de nivel inicial en tareas diferentes que auxilian el trabajo de las seños en el aula. Miriam nos cuenta que: “Son docentes con mucha antigüedad, totalmente comprometidas, responsables y siempre están innovando”. El Jardín se destaca por ese compromiso, del que las familias que forman parte del 101 dan fe: “No solo se aborda la cuestión educativa, la mirada social es amplia. El Jardín aborda no sólo la cuestión pedagógica, sino lo social y lo afectivo. Valoramos una mirada integral” contaron la directora y la vicedirectora del Jardín.

Esa mirada amplia e integradora se plasma en la propuesta pedagógica del Jardín, las aulas son un lugar de aprendizaje que traspasan los muros en cada una de las actividades que se proponen. Los festejos programados para celebrar el día de los Jardines son un ejemplo: incluyen desde una obra de teatro en la que actúan los padres, una proyección de cine en el SUM con carrito de pororó para acompañar la peli, una salida con picnic y juegos en el Polideportivo y una fiesta de disfraces para los chicos.

También sus docentes se forman bajo estos criterios, el Jardín Nro. 101 fue uno de los jardines asignados por el Ministerio de Educación de la provincia para poner en práctica en el nivel inicial el proyecto de “Pedagogía Emprendedora”, que trabaja el pensar el mundo actual y el futuro desde la escuela, el barrio, la familia y la comunidad. La propuesta vino desde la supervisión del Ministerio, y los directivos del Jardín aceptaron ron participar del proyecto, que se pondrá en marcha durante el año.

Las docentes a su vez participan del programa de formación permanente “Escuela Abierta”, por segundo año junto a otras instituciones educativas de la provincia. El programa toma tres ejes de la política: realidad socioeducativa, la escuela como institución social e inclusión educativa. “Siempre lo que se intenta es reflexionar sobre las propias prácticas y además llevarlo al terreno institucional, para que sirva para enriquecernos”, cuenta Piky, mientras que Miriam destaca otro de los principales puntos de Escuela Abierta: “Es importante para comenzar a trabajar en redes desde el territorio”.

Además de los proyectos educativos que ofrece el Ministerio, que el Jardín asume con compromiso, la mirada de las directoras del 101 colabora con la idea de pensar al niño en un contexto amplio, y entender el aprendizaje en todos sus aspectos, más allá de los contenidos pedagógicos. Es que tanto Miriam como Ester saben lo gratificante que es la docencia, y desde el lugar que ocupan hoy en día en la dirección, siguen proponiendo herramientas para el diálogo con los chicos en el aula. El 14 de mayo organizaron un Taller Pedagógico del que participaron las docentes de la escuela, junto a otras 40 seños del nivel inicial y primario de las escuelas públicas de la ciudad. Fue un encuentro de perfeccionamiento docente e intercambio de instituciones, a través de la palabra.

El encuentro que organizaron en el Jardín es el de “Las mantas contadoras”, un proyecto de la pedagoga rosarina Laura Quinteros, docente de nivel inicial y formadora de docentes que inicia este proyecto por un tema recurrente, el de la problemática del habla y la escucha en los niños. El taller se propuso como un trabajo entre lo verbal, lo concreto y lo afectivo, volcando relatos en las “mantas” que funcionan como escenografías donde aparecen personajes. Narrar historias fue la propuesta del taller pedagógico en el que 40 “seños” que se capacitaron en esto de “narrar” y ponerle palabras a lo que pasa en el aula, que muchas veces tiene más relación con lo que pasa afuera.

La idea es brindar herramientas para que las seños trabajen la problemática de la escucha, no sólo en los niños sino también en los adultos: “Trabajar toda la oralidad, habilitar los espacios para que la palabra circule, atender a las diferentes miradas, ya que no todos somos iguales. El propósito fue generar nuevas estrategias en conjunto, porque siempre está la dificultad de los diferentes niveles, el quiebre que hay entre el nivel inicial y el nivel primario. La cuestión es lograr la continuidad de los aprendizajes a través de la escucha” contó Miriam Donato sobre la enriquecedora experiencia del taller de “Mantas contadoras”.

Encontrar nuevas estrategias para acompañar y garantizar el aprendizaje de los niños en el nivel inicial, entendiendo ese aprendizaje como amplio e integrador y como algo que no sólo queda en el niño. Las 20 mujeres que trabajan en el Jardín 101, sus alumnos, las familias que confían en la construcción de esa propuesta pedagógica, todos ellos tienen certeza de haber encontrado en la educación pública en general, y en el José Pedroni en particular la contención que colma sus expectativas. Feliz día Jardín.