1° de Mayo, escenario de nuevas luchas…
El 1 de Mayo de 1886 miles de trabajadores de Chicago (EE.UU.) se declararon en huelga y llevaron a cabo manifestaciones reivindicando y exigiendo la jornada laboral de 8 horas. Las actividades se extendieron hacia otras ciudades y duraron unos días, hasta que el 4 de Mayo culminó con un sangriento y mortal enfrentamiento con la policía. Varios dirigentes anarquistas de los trabajadores fueron encarcelados y condenados con procesos poco claros. La condena para algunos fue la horca.
En 1889, la Segunda Internacional Socialista, reunida en el Congreso de París, declaró el día 1 de Mayo, Día Internacional del Trabajador.
Como socialistas, no podemos dejar de recordar ese acontecimiento y saludar a todos/as los/as trabajadores/as en su día. No podemos dejar de homenajear a quienes, con su lucha, han logrado mejores condiciones laborales que hoy resultan indiscutibles.
Entre esas luchas no podemos dejar de mencionar, aquellas protagonizadas por los obreros de fábricas, cuyos patrones cerraban sus puertas en la crisis del 2001. Esos hombres y mujeres que con coraje, pelearon por conservar su trabajo y recuperar las fábricas cerradas. Ni la de aquellos/as que, ante la falta de trabajo, decidieron organizarse en cooperativas, estrechando lazos solidariamente. O la de tantos otros/as que le dieron rienda suelta a la creatividad y decidieron "emprender" sus propios proyectos. Este es un ejemplo entre otros que se podrían citar en nuestra historia nacional contemporánea, pero consideramos que se constituye como un hecho paradigmático de la lucha y la solidaridad de los trabajadores.
Hoy en día las luchas son otras, todavía resta garantizar el primer empleo para los más jóvenes, multiplicar las capacitaciones y desterrar al empleo "en negro" y el subempleo, consecuencias de décadas de neoliberalismo en nuestro país. Por eso, en estos reclamos, el accionar del Estado es fundamental, pero no cualquier dirección. Debemos recuperar su rol como regulador de relaciones y condiciones, tendiendo a la equidad social.
Debemos seguir alentado luchas por nuevas reivindicaciones, y repudiamos y condenamos a quienes reprimen o han reprimido a los trabajadores por reclamar mejores condiciones laborales, porque como decía Julio Cortázar, "es necesario comprender quién pone en práctica la violencia, si son los que provocan la miseria o los que luchan contra ella".
En nuestra ciudad, bregamos por la profundización y expansión de los derechos laborales. El trabajo dignifica al hombre y un hombre digno es un ciudadano comprometido con la transformación de su sociedad.
FELIZ DÍA A TODOS/AS LOS/AS TRABAJADORES/AS.
Espacio Socialista Alfredo Palacios - Funes
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