Moda circular: comenzó en ferias y hoy tiene un negocio premium y profesional
Cada vez más consumidores se liberan de prejuicios y acuden al mercado de segunda mano. Se pueden encontrar prendas como nuevas de etiquetas como Guess o Gucci.
Hace unos años atrás la moda circular se plantó como una tendencia “under” que disimuladamente vestían grupos amantes de lo retro y que acudían a ferias especiales donde encontraban todos esos atuendos que buscaban. Lo que comenzó como un estilo de pocos ganó popularidad en el último tiempo para convertirse en un modelo de negocio en expansión. En Funes mismo la moda circular gana cada vez más adeptos, al punto que Chi Retro, una marca que plantó local a la calle destaca la cantidad de proveedores y clientes que ya acumula en la zona.
“Desde Chi Retro transformarmos la venta de ropa de segunda mano en una experiencia en sí misma. A través del curado y la apertura de un local en la Galería Corrientes, en pleno microcentro rosarino”, aseguró Milena Schilman, titular de Chi Retro, en diálogo con InfoFunes. Al mismo tiempo, destacó que su intención fue llevar la moda circular a un nuevo nivel, donde la profesionalización son piezas clave en el crecimiento de esta tendencia.
"Arranqué vendiendo algunas prendas mías que ya no usaba, muchas eran cosas que compraba en viajes y me di cuenta que no me iban," comentó Schilman sobre sus primeros pasos en el negocio. Como muchos otros emprendedores, comenzó a vender ropa en grupos de Facebook. "Me daba cuenta de que las prendas que solía vender, en general de marca o de afuera, tenían buena salida. Así que empecé también a vender ropa de mi familia”, repasó sobre sus comienzos.
Fue entonces cuando decidió dar un paso más y profesionalizar su emprendimiento. "Se me ocurrió armar un Instagram y, de casualidad, vi que en el CEC estaban haciendo ferias. Me anoté y a partir de ahí se fue dando una cadena de personas que querían vender sus prendas. Lo que hago es tomar ropa en consignación, hacemos un 50/50 en las ganancias, y así empecé a vender bastante”.
En un momento se dio cuenta que el negocio crecía y tenía mucho potencial. Fue ahí cuando decidió profesionalizar su marca y lanzarse con un local comercial, con todo lo que esto implica. “Estamos enfocamos en la moda circular, pero con un toque premium”, afirmó. “Si bien en Rosario ya existe la Galería Cassini, donde venden moda circular, lo mío es distinto. Mi propuesta es ropa prácticamente nueva, de alta calidad, y de marcas reconocidas”, comentó.
A diferencia del prejuicio que muchos pueden tener, Schilman señaló que hoy recibe indumentaria y accesorios de etiquetas de marcas conocidas, como Rapsodia, Kosiuko, Vitamina, Jazmín Chebar, y marcas tope de gama internacionales como Guess y hasta Gucci. Además, busca incluir prendas actuales o clásicas, evitando las que sean puramente vintage. "Aunque tengo algunas prendas de décadas anteriores, prefiero enfocarme en lo que está de moda ahora o en lo atemporal”, apuntó.
El auge de la moda circular en tiempos de crisis
El contexto económico también jugó un papel importante en el crecimiento de Chi Retro. Según Schilman, muchas de sus clientas cambiaron sus hábitos de consumo debido a la crisis económica. "Tengo muchas clientas que antes podían acceder a determinadas marcas, pero ahora les cuesta más. La moda circular les permite seguir vistiendo prendas de calidad sin pagar precios exorbitantes”.
Además, quienes adhieren a cuestiones ecológicas o de cuidado del medio ambiente resultó un factor relevante para el auge de este tipo de emprendimientos. "Cada vez más personas se preocupan por el impacto ambiental de la industria de la moda y buscan opciones más sostenibles. Si bien es un tema que se menciona mucho, yo creo que es una realidad: la gente quiere reducir el consumo de fast fashion”, aseguró Schilman.
El éxito del emprendimiento no pasó desapercibido. A poco más de un año de haber comenzado, Schilman ya piensa en expandir su negocio. "Hace poco abrí mi primer local y tengo clientas no solo de Rosario, sino también de Funes, San Lorenzo y Capitán Bermúdez”, indicó y manifestó su intención de expandirse a Funes, ya que es de los lugares donde más proveedores y clientes tiene. “Por lo que es hoy Funes, ni bien pueda mi segundo local seguramente estará ahí”, aseveró.
De esta manera, la moda circular parece que llegó para quedarse y a medida que más consumidores opten por reutilizar y reciclar prendas, se prevé que este modelo continúe expandiéndose, integrándose de manera más fuerte en el comercio y en las grandes marcas, que ya están analizando qué beneficios les trae sumarse a la tendencia.
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