Calmo ya vendió la mitad de sus lotes y grandes firmas se aseguraron un lugar en el barrio abierto comercial único en la región

Calmo, el barrio abierto comercial que se construye en el ingreso a Funes por Autopista, avanza en sus obras centrales a la par que cierra operaciones de venta en una instancia de comercialización que resultó más que exitosa, según evalúa su titular, el empresario Gerardo Glusman. 

Asociado con la familia Angelomé en el desarrollo comercial que es único en la región, Calmo aportará a la ciudad un gran centro comercial a cielo abierto en la principal puerta de acceso a la ciudad y a metros de una arteria que ya ha convocado a grandes firmas desde la apertura de Havanna, Subway y Tangrill en la nueva estación de servicio, y las propuestas gastronómicas que ya funcionan en la zona como la del predio deportivo Damfield o los bares de Fuerza Aérea, frente a barrios cerrados.

Ya hay “muchos boletos de compraventa firmados y muchos en espera” porque la intención es “priorizar a compradores que vayan a hacer un desarrollo antes de quienes buscan un lote comercial a modo de inversión”, explicó Glusman. “La intención siempre fue que el barrio tenga desde el inicio un volumen de desarrollo y que arranque a funcionar, eso ya está garantizado con varios emprendimientos gastronómicos, con la obra que va a hacer el supermercado La Gallega, con una Clínica de salud, y comercios vinculados a varias firmas de artículos para el hogar, muebles, etc.”, agregó.

Entre los rubros que garantizaron su presencia, también se suman varias especialidades médicas, con consultorios de odontología, una clínica estética y farmacia A su vez, sus titulares están en conversaciones con grandes franquicias gastronómicos y empresas de Buenos Aires “que aún no están en tampoco en Rosario, empresas que tienen sede en Palermo o Nordelta y quieren invertir en Calmo”. 

Por otro lado, el desarrollo ya se aseguró con la venta de varios lotes el principal atractivo del barrio que será su polo gastronómico, asentado en una de las arterias centrales de Calmo que atraviesa el barrio de oeste a este, conectando a futuro Galindo con calle Irigoyen por el centro del barrio, detrás del Liceo y en paralelo a Autopista. Este paseo se suma al área verde que tendrá Calmo en un reservorio que funcionará a su vez como un claro atractivo asentado en su paisajismo.

Así, ya se vendió el 40% de los más de 100 lotes entre 500 y 1000 M2 con destino comercial y serán entregados a fin de año para que cada particular pueda iniciar su obra en un entorno que contará con todos los servicios, forestación propia y apertura de nuevas calles que serán un paseo en sí para la ciudad y una gran nueva conectividad para distintas zonas ya que desembocan desde el ingreso a Autopista hasta la rotonda de Fuerza Aérea e Irigoyen, con paso directo a los barrios Aguadas y San Sebastián.

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