Viernes, 27 de Septiembre 2024
Lunes, 13 de Febrero del 2017

Lo condenaron a ocho años de prisión por robar en Funes Hills y en una joyería

<p>El delincuente es un hombre con frondosos antecedentes penales, que ya purgó una condena por homicidio.</p>

Un reconocido personaje del mundo del delito, que ya cumplió una condena por el homicidio de un comerciante, que tiene varios antecedentes por violentos robos a viviendas de un country, a una joyería y además la fuga de una comisaría entre otras tantas andanzas, fue condenado a ocho años de cárcel luego de aceptar esa pena en un juicio abreviado que se homologó el viernes en los Tribunales provinciales.

Se trata de Jeremías Gonzalo Paulazzo, quien en 2003 fue condenado a 10 años de cárcel por el homicidio del comerciante Humberto Folch, un repartidor de garrafas de 60 años asesinado en medio de un trágico robo ocurrido en diciembre de 1999.

En la calle

Luego de cumplir esa pena, Paulazzo no se quedó quieto y en 2008, cuando gozaba de libertad condicional, se le sumó otra pena a 3 años de cárcel al ser declarado reincidente. En 2015 el hombre volvió a delinquir. Fue en el mes de marzo cuando robó la joyería MG, de Maipú 1062, luego de hacer un boquete en una pared. Con otros tres cómplices se llevó del local 6,2 kilos de oro y 8,4 de plata. Después el cuarteto ganó la calle por la puerta principal del comercio y se subió a un Volkswagen Gol Trend estacionado frente al ingreso para huir con rumbo desconocido.

Desbaratados

Al mes de ese resonante atraco, y tras un procedimiento policial que se realizó en una vivienda de Pujato al 7800, la banda fue desarticulada. Entonces siete personas fueron detenidas y entre ellas estaba "Jere" Paulazzo. Aquel día la policía le incautó tres kilos y medio de plata y unos cinco kilos y medio de oro, balanzas de precisión, miles de pesos, dólares y euros y lo derivaron a la seccional 24ª de Granadero Baigorria.

Pero el 16 de junio de 2015 se evadió de los calabozos de esa dependencia junto a otros siete reclusos con los que hizo un boquete, ganaron el patió y luego la calle. Tras ello, se supo, Paulazzo se asoció a un grupo de cordobeses con quienes, ametralladora en mano, cometió un violento robo a dos viviendas del country Funes Hill en julio de ese mismo año.

No obstante, la policía seguía investigándolo y escuchaba el celular de Jeremías, quien fue detenido con otros dos sospechosos por el atraco a un departamento de Moreno y Jujuy, y quedó nuevamente imputado de los hechos ocurrido en el country de Funes.

A fin del año pasado, el delincuente con frondoso prontuario asumió su culpa en los robos, lo cual habilitó el camino para que la defensora Silvana Lamas acordara con la Fiscalía un pena de ocho años de prisión que se debía formalizar en un juicio abreviado.

En ese momento, además, el juez Juan Carlos Leiva fijó una multa de 90 mil pesos que el imputado debía saldar con un auto Honda Civic de su propiedad. Pero como el imputado pretendía que ese bien quedara para su familia, dudó en firmar el abreviado, postura que en aquel momento llevó al juez a no homologarlo.

Fin de la historia

Pero eso no impidió que las partes siguieran puliendo el acuerdo y que la defensa de Paulazzo terminará de convencerlo sobre los beneficios del juicio, que finalmente tuvo resolución el viernes pasado en una audiencia que se celebró en los Tribunales.

Del trámite participaron los fiscales Nicolás Foppiani y Juliana González con la defensora Nancy Zully, quien comunicó que Paulazzo aceptaba las condiciones del acuerdo, que estipulaba la entrega del auto, lo que finalmente aceptó.

Claro que en la sala se hizo presente una persona que figuraba como titular registral del Honda Civic en cuestión, quien dijo que esa condición era sólo aparente y que el verdadero dueño del auto es el acusado, lo cual dejó habilitado al juez para dictaminar.

El magistrado entonces homologó el juicio abreviado con acuerdo de las partes y condenó a Jeremías Paulazzo a la pena de ocho años de prisión y la multa de noventa mil pesos (que cubrió con el auto) por tres hechos de robo calificado por el uso de arma de fuego, por haberse cometido en poblado y en banda, por escalamiento, privación ilegítima de la libertad y evasión, además de declararlo reincidente.