Miércoles, 15 de Mayo 2024
Lunes, 25 de Abril del 2016

Vecinos impidieron la tala de quince viejos nogales

<p>La apertura de una calle implica el corte de las especies. Algunos se vecinos se oponen y detuvieron la tarea de los municipales. </p>

El viernes pasado por la mañana, un grupo de empleados municipales acompañados por la policía se disponían a cortar unos quince árboles nogales de unos 70 años de antigüedad que supuestamente entorpecían la apertura de la traza de la cortada Saldías, en Zona 7.

Los vecinos, alertados por los ruidos, corrieron a detener el hecho, y lo lograron llegando al extremo de ponerse debajo de los árboles, obligando a los municipales a retirarse.

Ricardo Ravaglia, presidente de la vecinal del barrio, habló con InfoFunes y detalló cuál es el conflicto que se da en la zona. "Unos vecinos querían abrir la calle Saldías, que termina en determinado lugar pero la traza está. Perfecto, tienen todo el derecho legal a hacerlo. De un lado de la calle ya están cedidos los terrenos, y del otro lado ya están los papeles que dicen que otro vecino tiene que ceder una fracción del suyo. Hasta ahí todo bien, pero de pronto, la gente que quiere abrir la calle plantea que hay que sacar quince nogales de 70 años, y obviamente los vecinos se pusieron en contra de esto", explicó Ravaglia.

"Se hicieron los estudios y se determinó que la ausencia de los nogales agregaría sólo 60 centímetros más de ancho de calle, cuando ya tiene casi 5 metros. El ancho de un carril de la Ruta 9 es de 3.60 metros. Es una locura sacar los árboles por tan sólo 60 centímetros, la calle ya tiene para hacer un ancho de más de cuatro metros", agregó.

"Ahí empezó la pelea, fuimos a Mediación. Ellos se pusieron en una posición intransigente de querer que saquen los árboles y más nos opusimos nosotros. Hablamos con Juan Vincenti (secretario de Planeamiento), nos dijo que iba a hacer todo lo posible, que íbamos a hacer una segunda mediación porque la primera fracasó. Hoy, en el peor de los casos, se puede hacer la calle. Ellos dicen que van a entrar con camiones y los árboles molestan por la altura. Pero cortamos las ramas de ese lado y listo, el árbol crece para el otro lado, no molesta y no es necesario tirarlo, no le afecta en nada al árbol. Ellos tienen el derecho de abrir la calle, de tener acceso a su casa, pero hay un punto medio. Hay gente que tiene que ceder, está en la ley, pero tirar los árboles es una locura", comentó el vecinalista.

Sobre el papel de las autoridades, Ravaglia apuntó a Vincenti: "Fuimos a hablar con él junto con otros dos vecinos. Nos dijo que a los árboles había que salvarlos, que esto, que lo otro, parecía que nos habíamos topado con Greenpeace", contó Ravaglia. "Se rasgó las vestiduras diciendo que iba a sacar un proyecto de conservación de árboles donde pretendía que vos no puedas tocar un árbol ni siquiera dentro de tu casa sin un permiso municipal y no sé qué otras cosas más, y se comprometió a llamarnos. Mientras estábamos esperando que llame, el viernes a la mañana llega una cuadrilla para cortar los árboles, con una orden firmada por el propio Vincenti, y la única forma que encontramos de que no los corten fue ponernos abajo (por recomendación de la policía). La cara de los empleados municipales y de la policía era de que les parecía una locura y casi que buscaban cualquier excusa para evitarlo, la sensación era esa".

Además de esto, la vecinal también hizo "presentaciones judiciales en Defensoría del Pueblo, la Asociación del Árbol de Rosario ha hecho presentaciones en Santa Fe, y nos está apoyando. Después está la discusión de vecinos en la que intentaremos que no los corten".

"Yo me quiero reunir con Juan Vincenti, con  Osvaldo Scoccia (responsable de Parques y Paseos), yo me reúno hasta con el Papa, pero si el Papa se esconde no se puede. No nos atienden los teléfonos hace cuatro días, no los podemos encontrar, en la Municipalidad no están. Si el servidor público que no está de forma pública, las cosas se complican", denunció Ravaglia, y cerró diciendo que "la Municipalidad debe encontrar la solución salomónica a esto. Que los vecinos tengan acceso a su casa y que todo el pueblo pueda seguir disfrutando de los nogales, que ni siquiera es que quedaron en el medio de la traza, están a un costado, aportan solo 60 centímetros, y no es uno, son quince".