Miércoles, 25 de Septiembre 2024
Viernes, 20 de Noviembre del 2015

“Son muchos hechos y la pena va a ser muy alta”

<p>Entrevista exclusiva a la fiscal Gisela Paolicelli, que logró imputar a dos masculinos por 23 entraderas, 12 de ellas en Funes. Por la cantidad de robos, las penas oscilarían entre un mínimo de tres y un máximo de 150 años.</p>

Tras 8 meses de investigación, la Fiscal de la Unidad de Investigación y Juicio de la Fiscalía Regional 2° de Rosario, Gisela Paolicelli, logró imputar a J.C. y a R.E., por 23 hechos de robo calificado por el uso de arma de fuego. Se tratan de dos robos a vehículos y 21 robos a viviendas particulares, conocidos como entraderas. Doce de esas entraderas se dieron en Funes, entre el 17 de octubre del año pasado y el 12 de junio del 2015.

Paolicelli habló en exclusiva con InfoFunes días después de la audiencia imputativa. Dio detalles de la investigación y adelantó cómo continuará con el proceso, que significa un duro golpe a una de las bandas que más impactaron en la ciudad y la región.

¿Cómo fue el proceso investigativo de las 23 entraderas?
Empezamos a recibir los casos como NN, con autores no identificados, tenemos un sistema en el cual empezamos a advertir que se repetía la modalidad y las características físicas de las personas. También empezaron a advertirlo en Funes, donde el golpe más duro fue en el verano pasado, en un lapso muy breve de tiempo, el mismo vehículo, las mismas características físicas, la modalidad, la cantidad de personas. Nos faltaba saber quiénes eran. Tuvimos falsas alarmas, hasta que finalmente a través de la Policía de Investigaciones (PDI), los que más conocimiento tienen en el tema, me dijeron que podía ser esta persona. Ahí direccionamos la investigación a tratar de que sea esta persona. Empezamos a averiguar con qué personas se movía, en contacto con una investigación bastante avanzada que tenía la gente de Cañada de Gómez.

 

¿Cómo cayeron detenidos los supuestos autores?
El primero que cae detenido, en San Lorenzo, cae en flagrancia, es detenido en un hecho en momentos posteriores de ocurrido. Los demás se dan a la fuga. Y más tarde la otra persona cae por allanamientos que hicimos. Encontramos armas de fuego, algunas son muy particulares y responden a las descripciones que hacen las víctimas de Funes. Y también caen dos personas más, que yo no los tengo vinculados. Después lo que nos faltaba era hacer los reconocimientos, los que hice dieron positivos.

 

¿Qué resta ahora?
Se hizo una doble audiencia, la imputativa, dónde se les informa a ellos los hechos que los tienen como sospechosos, solo ponerlos en conocimiento. Después se pide la medida cautelar, la prisión preventiva, que durante todo el proceso hasta llegar al juicio estén detenidos. Recién estamos en el primer paso procesalmente hablando, terminar de recoger toda la evidencia, reconocimientos en ruedas de personas, cruces de llamadas con los celulares secuestrados, recoger más rastros, fotografías, declaraciones de las víctimas. Recién ahí lo que hacemos es acusar y después se pone la fecha de juicio, si es que antes no hay un acuerdo con la defensa. Lo que pasa que acá va a ser difícil hacer un acuerdo, son muchos hechos y la pena va a ser muy alta.

 

¿Cuál será la pena?
Le imputé a uno de ellos 23 robos calificados, todos con arma de fuego, algunos con arma no hallada que tiene un mínimo de tres años. Disminuye un poco la pena cuando no fue secuestrada. En algunos de los hechos imputé que con el arma golpearon a la víctima, y eso eleva la pena a cinco. Tenés algunos con mínimo de tres a diez, y otros de cinco a quince. Supongamos que en 15 hechos tenga evidencia, estaríamos hablando de un mínimo de tres y un máximo de 150 años, porque el máximo se suma. Es una escala altísima, entonces a la hora de ponerte a negociar con la defensa es muy difícil que una persona acepte voluntariamente una pena tan alta. Pero hay que ver cuáles de los hechos se pueden probar.

 

¿Cuál fue el rol del Municipio en el proceso?
El Municipio colaboró. En primer lugar, iba llevando la información de todos los hechos, y obraron de nexo entre nosotros y las víctimas, nos ayudaron a convencerlas y sostenerlas, hay una gran desconfianza hacia la policía y el sistema de justicia, y ellos cumplieron ese rol. Y nos brindaron apoyo en todo lo que necesitábamos, pedí cámaras de seguridad y la mandaron, tuvimos un diálogo directo.

 

¿Por sus características, Funes es una ciudad que atrae a los delincuentes de entraderas?
En Funes fueron 12, otras dos fueron en Fisherton en realidad. En su momento lo que charlábamos con el Municipio era que sí por las características que tiene, que no es tan urbano, a lo mejor en una cuadra tenés tres casas aisladas, y eso puede que ayude. Pero en el centro de la ciudad también ocurre y una vez que entran a una casa no sé hasta qué punto es una cuestión demográfica o no. Lo que puede decir es que la zona geográfica de estos hechos está delimitada, Funes, Roldán, Fisherton y zona oeste de Rosario. Tiene que ver con los accesos que tenía la banda. Y no había tanta inteligencia previa, de hecho era mínima, de hecho se llevaban todo, no buscaban algo en particular, se llevaban hasta la máquina de afeitar.

 

No eran profesionales…
Eran profesionales, de hecho usaban armas de fuego y nunca usaron un tiro, pero nunca lastimaron seriamente a nadie. Era la violencia mínima y necesaria para lograr el objetivo. Apuntaban a desvalijar las casas, se llevaban todo.