Jueves, 28 de Marzo 2024
Lunes, 24 de Diciembre del 2018

Elecciones a a vista: se viene un verano movido

<p>Enero y febrero serán los meses clave donde, entre la pileta y el sol, se definirán finalmente las candidaturas de los diferentes espacios. Se ponen en juego tres bancas del concejo y el premio mayor: la Intendencia. ¿Cómo se preparan los partidos?</p>

 

Se acercan las fiestas pero la política no pone pausa: el gobierno santafesino confirmó el cronograma electoral y le puso fecha límite a la rosca electoral por las candidaturas, ya que el 22 de febrero habrá que oficializar las listas ante la justicia electoral santafesina. Posteriormente, las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias para dirimir candidatos puertas adentro de los frentes electorales tendrán lugar el 28 de abril y, finalmente, el 16 de junio Funes sabrá quién será su nuevo intendente.
 

La confirmación del 22 de febrero como fecha de cierre de listas permite aventurar un enero atípico. El primer mes del año suele ser el más tranquilo en materia política, con los protagonistas de vacaciones y el Concejo Municipal en receso, pero estando tan cerca de la definición de las candidaturas se avecina un verano con muchas negociaciones discretas e intrigas palaciegas que serán la comidilla de un círculo rojo funense revolucionado como ante cada elección. Por eso, aquí va una pequeña guía para entender qué se disputa en cada fuerza política local.

 

En Cambiemos. El oficialismo sufre la profundización de una grieta que había disimulado con un éxito relativo en sus primeros tres años de gobierno. El intendente Diego León Barreto está decidido a ir por la reelección y quiere como su primer candidato a edil al presidente del Concejo Carlos Olmedo, tal como sucedió en 2015. Pero hay un inconveniente: Olmedo está decidido a enfrentarlo en una interna y disputarle la candidatura a la primera magistratura municipal del espacio. Si bien en las cuestiones troncales de la gestión se los ve unidos, Olmedo fue uno de los críticos internos más feroces que tuvo León Barreto, lo que le valió momentos de distanciamiento y hasta la pérdida de funcionarios ejecutivos que le respondían.
 

¿Cómo terminará esta novela? La llave la tiene el presidente del PRO santafesino y candidato a gobernador Federico Angelini. Tanto León Barreto como Olmedo responden a su armado y saben que una definición del líder provincial del espacio vale más que cualquier diferencia que puedan tener. El presidente del Concejo sabe que, llegado el cierre de listas, puede bajar un pedido de unidad que, según le dijo a sus cercanos, tiene decidido acatar, por lo que encabezaría la lista de concejales de León Barreto.

 

Por lo pronto, y ante el silencio de Angelini, Olmedo juega ante la atenta mirada del intendente, quien sí tiene asegurada su candidatura y que repite confiado ante quien quiera oir: “Pase lo que pase, al que tengamos enfrente, le ganamos. Uno a cero, raspando, pero ganamos”.
 

El dilema Rímini. Paradójicamente, la candidatura de Federico Angelini dentro de Cambiemos le complicó los trámites a un candidato que parecía seguro de otro sector como el Frente Progresista Cívico y Social: el edil Juan Ignacio Rímini.
 

Es que en el lanzamiento del mandamás del PRO estuvo el presidente de la UCR provincial, Julián Galdeano, referente político de Rímini, lo que hace imaginar que el concejal radical podría recibir presiones para pegar el salto a Cambiemos y hasta materializar una unidad con Carlos Olmedo, que lo espera de brazos abiertos ya que sería la manera de blindarse ante una hipotética decisión de Angelini de bajarlo, dado que en esa situación podría jugar bajo el paraguas radical aportado por Rímini. Pero la opción de pasarse a Cambiemos es vista con malos ojos por el riminismo.
 

¿Por qué no quieren pegar el salto a Cambiemos en el sector de Rímini? Pura matemática: pasarían de ser primeros en un armado propio con muchas chances de meter un concejal y menos chances de pelear la intendencia, a ser segundos de un armado ajeno como es el de Olmedo, que ni siquiera saben si pasará el filtro de Angelini en el cierre de listas.

 

“¿Qué pasa si nos pasamos, jugamos con Carlos y después él nos deja para ir de candidato de León Barreto? Quedamos solos contra todo el oficialismo en una interna”, analizan con cautela en el radicalismo frentista, por lo que todos los caminos apuntan a que jugarán dentro del FPCyS. Mientras tanto, enfrente,el socialismo local busca un nombre fuerte que se le plante a Rímini en internas y le arrebate, luego de varios años, el dominio del Frente Progresista, y la apuntada es una personalidad del ámbito del deporte local.
 

¿Y los peronistas? El justicialismo local tiene el honor de tener el primer candidato que ya jugó fuerte en el plano propagandístico: hace pocas semanas la ciudad amaneció repleta de pasacalles y carteles con la leyenda “¡Ahora sí! Roly Santacroce”, acompañada de la foto del edil, lo que hace imaginar que irá por la intendencia por segunda vez tras la derrota en 2015, esta vez envalentonado por tres motivos: la “mala gestión” de León Barreto, la situación de crisis de Cambiemos a nivel nacional y el armado que encabeza la candidatura de Omar Perotti a gobernador, con el que el peronismo se tiene confianza de recuperar Santa Fe tras doce años.


Enfrente está el Frente Funense, liderado por el caudillo peronista y ex intendente Juan Héctor Miguez, que aspira a arrebatarle el liderazgo del Partido Justicialista a Santacroce en las PASO. Si bien no hubo confirmaciones, se sabe que parte del sector quiere al ex ARI Edgardo Frattini como candidato a intendente y al propio Miguez buscando renovar su banca, aunque también gravita la tercera pata de ese espacio, el ex candidato a concejal Andrés Beguer. Además, han tenido acercamientos con algunos militantes del partido rosarino Ciudad Futura y con dirigentes del Frente Renovador local como Marcelo Farré.
 

Por último, la izquierda. El partido vecinal Unidad Popular, que forma parte del Frente Social y Popular a nivel provincial, eligió un perfil bajo enfocado en la militancia tras no poder recuperar su representación legislativa en las elecciones de 2017.
 

Su principal figura, el ex concejal Mauro Miguez, quedó en cuarto lugar detrás de Martelli, Santacroce y Giantenaso. Sin embargo,en los últimos días intentaron abandonar ese bajo perfil aprovechando la proliferación de proyectos inmobiliarios y comerciales que ingresaron al Concejo, remarcando una postura que ya es histórica del espacio, contraria a autorizar esos desarrollos sin tener un plan regulador del crecimiento de la ciudad. El tema de los desarrollos será uno de los temas candentes de la campaña, por lo que el gesto se puede leer como el puntapié inicial de Unidad Popular con vistas a 2019.