Jueves, 25 de Abril 2024
Lunes, 18 de Marzo del 2013

Los dolores que quedan, son las libertades que faltan

Los dolores que quedan, son las libertades que faltan
Con respecto al comunicado del Departamento Ejecutivo Municipal respecto a la Ordenanza sancionada en el día de ayer.

Vamos por partes. En primer lugar, no es una "decisión tomada por los concejales", es una definición del Cuerpo Deliberativo. Esta diferencia puede parecer menor a quienes reivindican el lema de Luis XIV ("El Estado soy yo"), pero no es menor para quienes sostenemos los valores republicanos.
Esta soberbia ignorancia de los valores republicanos no sorprende, ya que es la misma que exhibiera nuestra correligionaria al momento de firmar los convenios a que hace referencia más adelante, por lo que, estando los mismos en contra de las leyes vigentes, los convierte en nulos. Esta cuestión no se le escapa al Ejecutivo Municipal, quien recientemente, a casi un año de haberlos firmado, los remitió al Concejo para que los avale.

El autor del comunicado (firmado como "Municipio de Funes", coherentemente con la definición política de ignorar la existencia de Concejo Municipal), acusa a los concejales (obviamente no al Concejo, ya que este no existe para él) de incumplimiento de las normativas provinciales y locales. Sería importantísimo que antes de hacer este tipo de aseveraciones, se informe. Un convenio no es una normativa municipal. Una Ordenanza sí lo es. Las leyes son normativas provinciales.

El autor del texto parece no haber leído la Ley 2756 "Orgánica de Municipalidades", ya que ignora hasta el hecho de que el gobierno municipal no se concentra en la figura del Intendente, si no que divide sus potestades entre el Intendente y el Concejo Municipal.

Tampoco leyó que es el Municipio, a través del Concejo, y no la Provincia, quién debe realizar el ordenamiento territorial de la ciudad.

Y evidentemente, la lectura que le dio a la Ordenanza 288/85 fue muy superficial, ya que en el artículo 51 bis, que cita, se salteo la parte que dice que las obras de infraestructura de interés público que puede ejecutar el urbanizador por la reserva fiscal, deben ser determinadas por Ordenanza, así como el párrafo final donde define claramente que es el Municipio y no el emprendedor, quien debe definir de qué manera se concreta la reserva fiscal.

No sorprende este comunicado. ¿Cómo va a sorprender viniendo de quién desde el día de su asunción decidió ignorar las instituciones de la democracia?

No sorprende pero, como radicales, duele.

Duele que quienes se manejan de esta manera se sigan llamando a sí mismos radicales.

Duele que estén entre quienes definen los destinos de la Unión Cívica Radical en nuestra provincia.

Duele porque están formando a jóvenes radicales en esta lógica tan alejada de las convicciones que nos dieran origen.

Duele porque compañeros de militancia que, estamos seguros, no comparten estos valores, los convalidan apoyando este manejo porque quien lo genera saca muchos votos.

Duele, pero seguimos en pie.

Sabemos, como decía un correligionario en estos días, que "en una verdadera democracia la diferencia entre los medios y los fines se diluye, porque si tenés como objetivo construir una democracia no podés recorrer caminos ajenos para llegar a esos fines. En una buena democracia la forma es el contenido y por lo tanto la forma es todo. Te garantiza que el modo de alcanzar los objetivos ya llevan consigo la potencia de sus propósitos. Son tan importantes los fines como los procedimientos. Por eso es tan relevante que el sistema republicano funcione bien y cada vez mejor." Y en ese camino seguimos.