Jueves, 25 de Abril 2024
Viernes, 11 de Mayo del 2018

La calle que crece

<p>La arteria que conforma la Avenida Fuerza Aérea conecta a la ciudad de este a oeste y se consolidó como una extensa área comercial. Barrios abiertos y cerrados, negocios, y la conexión con el acceso a autopista hacen que la zona sea cada vez más concurrida.</p>

Vanesa Fresno - InfoFunes

 

Tanto la Avenida Illia como su continuación en calle Fuerza Aérea, crecen y crecen mientras lidian con el pedido de mejoras. La arteria se consolida como calle comercial y negocios y servicios de los más variados fueron abriendo de punta a punta, mientras miles de vecinos se instalan en los barrios abiertos y cerrados que fueron asentándose desde años atrás, y que hoy en día se siguen proyectando.

 

Pero mientras la ciudad toma nuevas formas, impulsada por un crecimiento sostenido del sector sur de la ciudad, nuevas realidades se generan y las satisfacciones no siempre llegan acompasadas. En el ranking de los reclamos de la arteria está la tan esperada repavimentación y doble traza, en el tramo que une calle Irigoyen con el arroyo Ludueña, sobre Illia. Otra obra en la lista de espera es la rotonda de calle Fuerza Aérea y Galindo, acceso local con la Autopista nacional.

 

De ninguna hay novedades ni certezas. La rotonda fue rediseñada, en cuanto a la repavimentación, un año atrás se abrían los sobre de licitación pero aún no hay indicios de su comienzo. Hace unos días, en su visita por la ciudad, el diputado nacional del PRO Federico Angelini declaró: “Estamos a la espera de que el gobierno nacional pueda transferir los fondos. Está toda la voluntad, simplemente hay que encontrar la cuota presupuestaria, que no es lo más difícil pero está costando”.

 

Mientras tanto, y pese a la dificultad de transitar por la zona, el tramo que corresponde a Avenida Illia y Fuerza Aérea sigue sumando negocios y proyectos comerciales, recargando así su ya concurrida cotidianeidad. Ariel Giménez Rita, secretario de Planeamiento municipal reconoce: “La zona requiere de una atención importante porque los indicadores naturales están diciendo que se convirtió en una arteria comercial consolidada”.

 

Pero esta realidad, no desconocida por el gobierno local, se contrapone con la capacidad de gestionar las obras necesarias para acompañar un proceso que es potenciado pura y exclusivamente por estímulos privados.

 

“Necesitamos poder acompañar el crecimiento que la zona tiene, es la única asfaltada paralela de Ruta 9 hacia el sur. Esto es acompañar no solo el crecimiento de una arteria y unos barrios sino todo el sector oeste de la ciudad”, expresó Giménez Rita, mientras que asumió otra realidad: “Son tantas las urgencias urbanísticas que bueno, yo lo que quiero es tenerlo dibujado. Porque desarrollar un proyecto serio significa dibujar lo óptimo y luego, enfrentado a los presupuestos, no lo podes llevar a cabo porque no te dan los números”. Sin embargo se mostró alentado por las nuevas iniciativas privadas en la zona: “seguramente se podrá hacer algunas intervenciones con ayuda de emprendimientos futuros”.

 

El arquitecto proyecta para la arteria una ampliación de la traza, para concretar un doble carril al este y al oeste de calle Galindo. En relación al tramo que corresponde a Fuerza Aérea, también estima necesarias otras obras para permitir empalmes con las calles transversales: “Cambiar las luminarias, poner doble sentido de circulación, ampliar la traza, poner nuevas rotondas donde se va a ser el futuro barrio Vida”.

 

Desde la secretaría entienden que la arteria se convirtió en una de las principales de la ciudad en torno a la diversa oferta de servicios que se asentó por iniciativa de comerciantes locales. Si bien no piensa en una descentralización, el secretario de Planeamiento apunta a acompañar ese impulso privado para potenciar la oferta de conectividad con la zona oeste de la ciudad. “Donde finaliza la calle, si hubiera una colectora, sería una conectividad importante para empalmar con Ruta 9. Es el brazo a futuro”, indicó pensando en una segunda arteria que descongestione así la calle José Hernández, única pavimentada que conecta Ruta 9 con su paralela Fuerza Aérea.

 

Comercios

Horacio Herrera es, junto a su mujer Mariana Willis, uno de los comerciantes que más ha apostado a la ciudad. La Panadería abrió sus puertas sobre la Ruta 9 hace más de 20 años, cuando la Ruta era sólo ruta. En el año 2013 tuvo la misma iniciativa con su segunda sucursal en el barrio La Cardera, sobre calle Fuerza Aérea. “En aquella parte fuimos los pioneros”, aclaró.

 

“La zona comercialmente ya está instalada por su comodidad y ubicación, porque para cualquiera de los dos lados de ingreso de la ciudad Fuerza Aérea ha quedado como un núcleo comercial. Indudablemente es una arteria que va a seguir creciendo hasta que sea comercial de punta a punta”, entiende y argumenta: “Hay tres barrios privados y dos abiertos, y ahora vas a tener del otro lado dos cerrados y uno abierto más. Estamos hablando de diez mil personas viviendo sobre la misma calle”.

 

Herrera entiende que “hace falta que el Municipio haga. Funes es una ciudad en crecimiento, y esa zona necesita inversión. 25 años atrás cuando se preveía que la Ruta iba a ser una arteria comercial, se pensaba que solo calle Santa Fe podía serlo. Hoy es también Fuerza Aérea, con todos los barrios que tiene, sea de Galindo hacia al este o hacia el oeste”.

 

El mismo análisis hacen desde Planeamiento: “Illia y su continuación en Fuerza Aérea es la arteria paralela hacia el sur después de que la Ruta 9 se convirtió en la “avenida” principal de la ciudad. El casco histórico queda ligado a la Ruta, y Fuerza Aérea queda así ligado a la zona oeste”.

 

Si bien los comerciantes coinciden en el análisis con los funcionarios, los reproches por parte de los primeros no dejan de hacerse escuchar: “La Municipalidad políticamente no va tomando decisiones, si hubiera tomado decisiones ya hubiera hecho la rotonda de Galindo, ya hubiera ensanchado la arteria. Esas son las decisiones políticas que no se toman, porque no hay un acompañamiento al comercio ni a las inversiones por la parte pública, ellos solo van detrás de lo que van haciendo otros”, señaló Herrera.

 

El fenómeno del crecimiento comercial de la arteria, que hasta pocos años atrás era sólo un lugar de tránsito, no deja sin embargo de alertar al mismo comerciante: “Los privados vamos detectando las posibilidades y las vamos explotando, no sé si está tan bien que sea así. Porque el problema también es que mientras más negocios haya más circulación va a haber; por ejemplo no hay estacionamiento en Funes, porque nunca se la pensó como comercial y sin embargo lo es. Ya tendrían que ir buscando soluciones”.

 

Pero en la zona no sólo se proyectan nuevos barrios. Hace pocos días se anunció el desembarco de la sucursal del supermercado rosarino La Gallega, en un predio ubicado sobre calle Fuerza Aérea y Santa María. “Como comerciante no puedo negarme a que los demás también vendan, lo que digo es que hay algunas superficies que tendríamos que tener cuidado”, alertó el panadero.

 

“Cuando lo público no hace nada, los privados hacemos lo que queremos. Cuando hacemos lo que queremos a veces no hacemos lo que le hace falta a la ciudad… si vos abrís un gran supermercado tal vez se funden quince localcitos. Y es un comercio de afuera, que paga afuera, no deja guita. Tenemos que tener un poco de criterio, y no perjudicar a nadie, pero no siempre la política está a la altura”, cerró.