Miércoles, 24 de Abril 2024
Viernes, 15 de Diciembre del 2017

“Todos pueden acudir a entrenar y a divertirse”

<p>De cursos en antiterrorismo a custodia vip: el currículum de Diego Manso, el profesor de defensa personal que sorprende en las clases de Tao Gym.</p>

 

Diego Manso es, sin ninguna duda, un especialista. Hace 27 años comenzó a practicar kung fu en lo que fue el puntapié inicial a un camino que desandó de la mano de las artes marciales y que lo llevó a ser hoy uno de los más importantes instructores de la Organización de la Formación en Sistemas Israelíes (OFI), la entidad que regula los sistemas israelíes de combate en Argentina.

 

El kung fu fue la primer arte marcial que Diego comenzó a practicar, aunque cuenta que hoy está “retirado de su práctica activa”. Luego de eso, viajó a Brasil para formarse en Shuai Chiao, un arte marcial de lucha china, de la cual fue el primer representante en Argentina. “En el año 2011 comencé a formarme profesionalmente en Defensa Personal, primero con el sistema close combat rhangdo, del cual soy instructor, y luego, siguiendo una formación en custodia vip, llegué a la OFI. Hice los cursos de antiterrorismo y de custodia vip para luego comenzar el curso de entrenadores nacionales. Gracias a eso pude obtener la posibilidad de representar a la organización en Rosario”, relata.

 

En los últimos años, Diego se enfocó en la especialización en defensa policial y personal profesional de seguridad y llegó a participar dando instrucción en cursos del Ministerio de Seguridad de la Nación y de la Policía de la Provincia de Santa Fe. Además, sigue dentro de la OFI y ya es coordinador del grupo de instructores de Santa Fe, Chaco y Entre Ríos, participando activamente de los cursos de formación que organiza la federación de sistemas israelíes.

 

¿Pero qué es un sistema israelí? Para saberlo, todos los sábados, de 11 a 13hs, Diego da clases de Krav Maga en el Tao Gym, aunque accede a explicar que es “instructor de sistemas israelíes, porque el Krav Maga no es el único sistema israelí de combate. Particularmente soy instructor de Kapap y de Krav Maga”. “El Krav Maga es un sistema de combate cuerpo a cuerpo, desarrollado en los años 40, quien sistematizó el entrenamiento para optimizar el tiempo de práctica y la pertinencia de las técnicas acorde a la realidad del momento”. ¿Y el Kapap? “Por ese tiempo, las fuerzas especiales habían desarrollado un sistema de combate en sus diferentes fases, a mano vacía, con diferentes tipos de armas, proyecciones al piso y toda actividad referida al combate. A este sistema lo denominaron Kapap, porque es el acrónimo de krav panim el panim (combate cara a cara). El Kapap tiene como características principales el aprovechamiento de los movimientos instintivos del cuerpo en situaciones de conflicto y evaluación y evolución permanente para dar respuestas eficaces a las diferentes demandas, la realidad de un personal de seguridad privada, de un policía, de un militar y de un civil son totalmente diferentes una de otra”, detalla el instructor.

 

“Todos pueden acudir a entrenar y a divertirse”, cuenta Diego. “Las clases de defensa personal (Kapap y Krav Maga) son abiertas, hay personas de diferentes edades y género, incluso padres con hijos. No se requieren conocimientos previos y el hecho de que se haya originado en las fuerzas especiales no quiere decir que la persona se entrena como un soldado, sino que buscamos el desarrollo físico, técnico y mental de la persona, no tiene piso ni techo”, agrega.

 

Diego es otro más de los profesores de la familia del Tao Gym, y destaca que en el gimnasio funense hay “una característica muy poco común”, y es que “se trata de un desarrollo constante de inclusión y trabajo en equipo por parte de los instructores”. “Gastón Medina, profesor de taekwondo, y Alan Moratorio, profesor de muay thay, han venido a darnos clases de sus especialidades y hemos tenido la visita de sus alumnos tomando clases de defensa personal”, grafica Diego. “Nos conocemos, entrenamos juntos, aprendemos a valorar lo que hace el otro, a respetar la diversidad, a enseñar y a dar autoridad para que nos enseñen. Las personas que entrenamos en Tao Gym tenemos algo en común: somos una familia y trabajamos para que las personas que confían en nosotros salgan, cada día, mejor de lo que llegaron”.