Rossetti y el aumento de TGI: "Ponen el número que se les canta"

El administrador del club de campo Kentucky y fundador de otros barrios cerrados Juan Félix Rossetti calificó como "discriminación" al aumento de más del 130% de la TGI para los habitantes de dichos vecindarios privados. Además, criticó duramente a la clase política de la ciudad y no descartó que haya acciones jurídicas contra el aumento.

"Acá siguen haciendo todos la fácil de meterle la mano en el bolsillo al contribuyente en vez de administrar y ajustar el gasto del estado. Me parece excesiva toda la suba que hubo en general", disparó Rossetti. "Quién apoye a esta irracionalidad es como quién apoye a un ladrón", dijo, más tarde.

El empresario explicó que los clubes de campo y barrios cerrados, "teniendo en cuenta que la TGI no es un impuesto sino que requiere una contraprestación de servicios, en la práctica deberían pagar menos, porque requieren menos contraprestaciones de servicios que la parte abierta, porque tienen servicios internos que los cubren". El fundador de varios barrios cerrados locales dió como ejemplo la recolección individual de residuos, el alumbrado y la limpieza de calles, que son llevados a cabo por personal de la administración y no por personal municipal. "Antes había un equilibrio porque estaban emparejados con lotes abiertos similares por más que tengan menos servicios, ahora evidentemente hay una discriminación", agregó.

"Es posible que se de la curva de Laffer, un estudio que explica que cuando un estado sube demasiado un impuesto, o es tan mal aplicado, en la práctica la recaudación baja, porque la gente deja de pagar", analizó Rossetti, además de revelar que "hay mucha gente moviéndose para ver si se puede hacer alguna acción judicial por discriminación en la aplicación de las tasas".

El administrador de Kentucky ubicó a la cantidad de empleados municipales como el gasto más importante de la Municipalidad y propuso bajar 200 empleados mediante una regla del 3x1: "Dejar que cada 3 personas que se vayan voluntariamente o que se jubilen o que fallezcan, la Municipalidad pueda reponer a uno hasta bajar por lo menos 200 personas y que esto sea aprobado por todos los partidos". "Habría que empezar a trabajar sobre el costo del estado, hay un costo excesivo. El estado se tiene que hacer menos cargo de muchas cosas y ocuparse específicamente de lo que le corresponde, que es el mantenimiento, hacer obras que sirvan. Tenemos un deterioro impresionante de los servicios. El estado debe ser eficiente y utilizar meritocracia", dijo Rossetti, quién pidió además "que la Municipalidad publique en la página web todo el presupuesto, en qué se va a gastar y la nómina de empleados, con nombre, cargo y sueldo asignado para que todos sepamos a quien le pagamos con nuestra plata".

"Tienen que demostrar que necesitan esa plata y por qué. No hay ningún estudio mostrando de donde sacan ese costo, es todo arbitrario, al tum tum, ponen el número que se le canta. Esta gente está totalmente equivocada: el Ejecutivo, con una ineficiencia total en la gestión, y los concejales que votaron esto. Agarraron la ruta del facilisimo. Además ya sabemos cómo son las negociaciones a fin de año de esto, 'dame esto porque no te pago los sueldos' u otras cosas. Eso es algo vox pópuli en Funes. No puede ser tampoco que a los concejales se les deba tanto dinero y se juegue con eso", sacudió Rossetti. "Creo, y ojalá se de, que esto traerá menor recaudación, que la gente se harte y se den cuenta que la solución no viene por reunirse 6 personas y definir cuánto van a pagar los contribuyentes de Funes en vez de hacer el trabajo más arduo que sería cómo hacer más eficiente el dinero que se recauda para brindar los servicios", finalizó.