Sábado, 20 de Abril 2024
Miércoles, 30 de Diciembre del 2015

Carta al intendente León Barreto

Carta al intendente León Barreto

Estimado intendente León Barreto:

Soy un intrascendente arquitecto nacido en la ciudad de Funes hace apenas  55 años. No soy quien para darle consejos a nadie y mucho menos a usted, quien considero, la persona más importante de la ciudad.


Usted confiesa y prometió en campaña que es una persona amplia y abierta a escuchar la voz del pueblo. Que no es gobierno quien no esté atento a la opinión de los demás, mal puede representarlos. También lo remarcó en campaña y lo dejó estampado en sus afiches, que no se siente dueño de la verdad y gobernar es cuidar y poner al Municipio cerca de la gente. Agregó, que gobernar es decir la verdad y que usted está listo y preparado para hacerlo.


Señor intendente, usted también me comentó en una charla informal, cuando nos reuníamos en la calle por seguridad, que si era intendente, no iba a aprobar ningún emprendimiento hasta que no tengamos un proyecto de ciudad.


Señor intendente de todos los funenses, y otra vez con el mayor de los respetos, insisto usted tiene todo el derecho a hacer lo que considere correcto, pero quiero recordarle que está devaluando su propia palabra que vale mucho.


Hoy hay muchos vecinos entre los que me encuentro, que queremos ser escuchados y yo personalmente explicarle que usted puede estar por cometer un error. 


Nuestra ciudad está enferma urbanísticamente, le diría que en terapia intensiva. Necesita de cuidados intensivos y no agregarle más enfermedades.


Señor intendente su querida ciudad, también de todos los que vivimos en ella, necesita de una urgente intervención de grupos interdisciplinarios que la analicen, estudien y dictaminen que remedio usar para su cura (plan urbanístico).


Los servicios básicos están colapsados. Señor intendente, usted sabe que no los puede brindar como corresponde. El tránsito es un caos. No se puede distinguir entre arteria principal, secundaria o barrial, están todas a la miseria. Y así, señor intendente, podemos seguir nombrando muchos de los problemas que padece la ciudad (enfermedades).

 

Por favor señor intendente, no se equivoque, no quiera auto medicar a nuestra ciudad con remedios que la han enfermado.


Todos necesitamos progreso. Pero quiero recordarle señor intendente, que el progreso tiene dos caras, importantísimas por igual. Una es progresar en cantidad y otra en calidad. La cara de la calidad está depreciada. 


Señor intendente por favor, queremos crecer en calidad y orden. Por ahora, no más cantidad.


Otra vez le pido mil disculpas por mi atrevimiento. Le juro que lo hago con la mejor de las intenciones, le mando un fuerte abrazo y mis mejores deseos. Usted debe apostar a la sana rebeldía y no al silencio cómplice ni obsecuente.

Oscar Carrera - DNI 13.748.522